Ciudad de México — Tras haber registrado crecimiento en los primeros seis meses del año, la economía de México, la segunda mayor de América Latina, desacelerará su ritmo en los próximos trimestres, dijo el viernes una misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) al concluir una visita al país.
México enfrenta un entorno difícil, ya que la inflación mundial se ha disparado. Pese a que la recuperación posterior al punto máximo de la pandemia de Covid-19 ha sido relativamente gradual, la inflación se ha acelerado a niveles no observados en dos décadas, dijo la misión en un informe de conclusiones preliminares publicado el viernes.
El Gobierno mantiene una estimación del PIB del 2,4% para la economía mexicana en 2022 y del 3% en 2023. En septiembre, México reportó una inflación del 8,7% a tasa anual, ligeramente menor a la esperada por el mercado, que implicó un freno en su escalada y marcando probablemente que esté alcanzando su punto máximo, según cifras del instituto de estadísticas, INEGI divulgadas el viernes.
El informe de la misión del FMI destaca que las perspectivas de crecimiento a corto plazo de Estados Unidos, el mayor socio comercial de México, se han debilitado, ya que los ingresos reales se ven mermados por la inflación y la política fiscal y monetaria se está endureciendo. En general, dijo, las condiciones financieras mundiales se han endurecido a medida que los bancos centrales han respondido ante la elevada inflación, lo que aumenta el riesgo de reversión de los flujos de capital en las economías emergentes.
Según el informe, México está bien situado para navegar en este entorno potencialmente turbulento, dada prudencia en la política macroeconómica y sólidos marcos de política fiscal y monetaria. No obstante, destacó que las secuelas de la pandemia y el entorno mundial más difícil podrían agravar los problemas de larga data de bajo crecimiento y alta desigualdad.
“En consecuencia, a pesar de los buenos resultados del primer semestre de 2022, se prevé que el crecimiento disminuya en los próximos trimestres. Se espera que la inflación se estabilice en el segundo semestre de 2022 y que luego disminuya gradualmente, ya que el aumento de los precios de las materias primas y otros factores de costo siguen repercutiendo en los precios”, dijo.
El balance de riesgos para las perspectivas de crecimiento se inclina a la baja, mientras que los riesgos de inflación se inclinan al alza. Una inflación mundial o nacional más persistente, un nuevo repunte de los precios internacionales del petróleo o de los alimentos, un endurecimiento mayor de lo previsto de las condiciones financieras mundiales, o una desaceleración más brusca del crecimiento de Estados Unidos son los principales riesgos a los que podría tener que enfrentarse México.
Destaca que en el lado positivo, “una aceleración de la deslocalización de la actividad económica para un mejor acceso al mercado norteamericano podría moderar el impacto de un menor crecimiento de Estados Unidos”.