Ya son más los rusos huyendo del llamado a filas que los que se suman al ejército

Las 200.000 personas alcanzadas por la conscripción palidecen ante las, al menos, casi 350.000 que han salido del país para evitar el ejército

Por

Son muchos más los rusos que han dejado el país que los que se ha alistado en el ejército desde que el presidente del país, Vladimir Putin, anunciara una movilización parcial para apuntalar su tambaleante invasión de Ucrania.

El ministro de Defensa del país, Sergei Shoigu, dijo el martes que más de 200.000 personas han sido llamadas a filas desde el 21 de septiembre, fecha de la movilización.

La cifra iguala el éxodo de más de 200.000 rusos solo hacia Kazajistán en el mismo período de tiempo, según datos del ministro del Interior del país. Además, casi 69.000 rusos cruzaron a Georgia para el 30 de septiembre, de acuerdo a datos de este otro país, donde se formaron largas filas de vehículos de cara a la frontera desde el anuncio.

La UE reportó la semana pasada que 66.000 rusos habían entrado al bloque hasta el 25 de septiembre, la mayoría a través de Finlandia, que restringió fuertemente los arribos de rusos el pasado viernes en respuesta a la creciente cifra.

En Mongolia, que esta semana ofreció flexibilizar las normas de residencia para las personas procedentes de Rusia, los funcionarios de fronteras informaron de que más de 12.000 rusos entraron en el país hasta el 2 de octubre.

Otros destinos populares como Turquía, Armenia y Azerbaiyán, donde los rusos pueden entrar sin visado, no han revelado datos sobre las llegadas desde que la orden de movilización de Putin conmocionó al país y puso de manifiesto la realidad de la guerra en Ucrania, que ya está en su octavo mes.

Aunque no todos los que han salido de Rusia desde la orden de movilización de Putin habrían sido elegibles para el reclutamiento, muchos se apresuraron hacerlo en medio de la incertidumbre generalizada sobre los términos de la convocatoria. Después de que Shoigu dijera que se iba a movilizar a 300.000 reservistas, se acumularon los informes de hombres reclutados que estaban oficialmente exentos, incluidos los que eran demasiado viejos o tenían enfermedades crónicas.

Las redes sociales también se llenaron de quejas de algunos reclutas sobre las pésimas condiciones de vida y la falta de formación y equipamiento antes de ser enviados al frente.

Todo ello motivó la exigencia de Putin de “corregir rápidamente nuestros errores y no repetirlos” en una reunión con su Consejo de Seguridad el 29 de septiembre. “Aquellos que han sido reclutados sin los motivos adecuados deben ser enviados a casa”, dijo.

-- Con la ayuda de Terrence Edwards.

Lea más en Bloomberg.com