Bogotá — Las exportaciones de Colombia a Venezuela podrían cerrar el próximo año entre US$1.076 millones y US$1.800 millones en un escenario optimista de mayor crecimiento de la economía venezolana y asumiendo una participación del 2,3% de los productos colombianos, según un informe de la Dirección de Investigaciones Económicas, Sectoriales y de Mercado de Bancolombia.
El informe, titulado Apertura comercial con Venezuela: Oportunidades y retos, indica que este año las exportaciones colombianas a ese destino podrían alcanzar los US$716 millones, cerca del 1% del PIB venezolano.
Entre los aspectos a destacar de la reapertura mencionan la cercanía geográfica, una coyuntura de altos precios del petróleo, así como la posibilidad de ofrecer bienes que el aparato productivo venezolano no puede generar.
Síguenos en las redes sociales de Bloomberg Línea Colombia: Twitter, Facebook e Instagram
Asimismo, ven posible una estabilización de la inflación venezolana gracias al proceso de dolarización, que además hace competitivos los bienes colombianos.
Ya entre los retos el reporte hace mención al restablecimiento de la confianza entre autoridades y empresarios, la baja capacidad adquisitiva de la población venezolana, dificultades logísticas y operativas y deudas históricas pendientes y negociación de medios y garantías de pago.
“Reactivar el comercio no solo depende de la voluntad política, sino también de gestionar las múltiples restricciones operativas que ya se han empezado a manifestar. También será esencial la realidad económica de Venezuela, ya que su economía es hoy apenas un cuarto de lo que era hace una década. Afortunadamente en los últimos meses esta ha dado algunas señales de estabilización”, indica.
Según el informe, entre los sectores que lograron la sustitución de destinos de exportación destacan el de alimentos y bebidas, productos químicos, maquinaria eléctrica, entre otros.
Por lo anterior, para los analistas de Bancolombia “las mayores oportunidades están en productos que en el pasado no consiguieron sustituir la demanda venezolana en otros destinos”. Destacan particularmente cinco sectores:
1. Textiles: esta industria ha sentido uno de los mayores golpes por el decaimiento del flujo comercial entre ambos mercados, pues en el 2008 el 65% de los US$732 millones FOB en textiles exportados tuvieron como destino final Venezuela. Por lo anterior, los analistas consideran que la normalización de las relaciones con se país “representa una gran oportunidad para el sector, en la medida en que podría recuperarse un mercado natural como el venezolano y dinamizar nuevamente las ventas”.
2. Confecciones: el mercado venezolano llegó a representar cerca del 56% de lo exportado por este sector, por lo que la apertura comercial podría beneficiarlo nuevamente. En 2007 el sector de las confecciones se anotó ventas al exterior por US$1.486 millones y en 2008 estas llegaron a US$1.332 millones. En 2021, las ventas externas del sector fueron equivalentes a solo el 39% de los registros alcanzados durante el mejor año.
3. Cuero y sus productos: este sector pasó de exportar a Venezuela unos US$488 millones en 2008 a registrar ventas prácticamente inexistentes en 2021. De acuerdo al informe, “desafortunadamente hasta el momento el sector no ha podido sustituir con otros destinos de exportación y por lo tanto, el año pasado las ventas externas totales tan solo equivalen al 23% de los valores observados en 2008 (US$693 millones)”.
4. Vehículos: en la época dorada del flujo comercial el mercado venezolano se convirtió en el principal destino de exportaciones de esta industria, participando con el 83% de la ventas totales al exterior en 2007 (US$1.182 millones). Las tensiones entre ambos países llevaron a que las ventas de esos productos a ese mercado se desplomaran desde los US$983 millones de 2007 hasta los US$20 millones en 2013. Esto se terminó de agravar en 2014 con el cierre de la ensambladora Mazda (CCA - Compañía colombiana automotriz), “que participaba de manera importante en las ventas de vehículos a Venezuela y otros destinos”.
5. Papel y sus manufacturas: esta industria está dentro de los sectores de la economía colombiana que también se beneficiarían por la apertura comercial, ya que desde el inicio de las tensiones con ese país el comercio de esos productos ha caído notablemente. Las exportaciones de este sector alcanzaron un pico entre 2008 y 2009 cuando superaron los US$300 millones.
