Bloomberg Línea — La industria turística de Costa Rica sigue mostrando algunos signos de recuperación tras la crisis derivada de la pandemia y así lo evidencian informes de instancias oficiales.
Los extranjeros que visitaron el país centroamericano durante el segundo trimestre del año gastaron US$737.5 millones, mucho más que los US$366.1 millones del mismo período de 2021, es decir, un crecimiento interanual de 101%, según el informe de balanza de pagos del Banco Central de Costa Rica (BCCR). Casi un 88% de los ingresos provienen de viajes personales y de estos, un 91% por motivos de turismo.
En los primeros seis meses del año, el país registró 1.2 millones de viajeros, de los cuales, el 92% llegó por vía aérea. Sin embargo, aún no alcanza los niveles previos a la crisis sanitaria, cuando el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) contabilizó en 2019 a más de 1.7 millones visitantes internacionales.
“Sabemos que el sector turístico requiere de muchísimo para recuperarse y para volver a crecer”, reconoció el presidente Rodrigo Chaves en un evento reciente para conmemorar el Día Internacional del Turismo en San José. El mandatario dijo que el 88% de las empresas del sector son microempresas y debido al impacto de la covid-19, necesitan de recursos, inversión y capital de trabajo para recuperarse.
En esa misma actividad, el Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD), la Cámara Nacional de Turismo (Canatur) y el ICT presentaron el Programa de Aval de Cartera Autoexpedibles, una iniciativa de crédito para impulsar la reactivación económica del área, la cual estará dirigida a pequeñas empresas de hoteles, restaurantes y otras del rubro.
Comienza la temporada de cruceros
Días atrás, Costa Rica inició la temporada de cruceros 2022-2023 con la llegada del buque Carnival Spirit, procedente de México al puerto de Puntarenas, en el Pacífico. El ICT espera superar en un 20% las cifras alcanzadas antes de la pandemia de la covid-19, cuando se reportaron 250 cruceros que llegaron al país en 2019.
Según esta institución, entre septiembre 2022 y julio de 2023 anclarán más de 300 cruceros en los seis puertos autorizados en el país: Limón, en el Caribe; Playas del Coco, en el Pacífico norte; Puntarenas, Caldera y Quepos, en el Pacífico central; y Golfito, en el Pacífico sur.
Del total de arribos, un 40% serán cruceros de expedición y lujo, caracterizados por un mayor gasto promedio por turista, que significa mayores ingresos económicos para las ciudades puerto y para sus habitantes, prevén autoridades.
El ministro de Turismo William Rodríguez dijo a medios locales que continuarán haciendo las acciones necesarias para “vigorizar la industria de cruceros no solo pesados, sino medianos y pequeños de lujo, haciendo lo posible para que los puertos de atraque del Pacífico y Limón ofrezcan las condiciones necesarias de infraestructura y oferta turística para tours cercanos que puedan beneficiar efectivamente a las comunidades costeras”.
En septiembre del año pasado y tras 17 meses de pandemia, Costa Rica reabrió su temporada de cruceros. En ese lapso registró el arribo de 80 busques en la costa Pacífica y con cerca de 30.000 turistas internacionales.
En abril pasado, el país eliminó el requisito final de pase de salud y seguro de viaje, incluso para visitantes no vacunados.
