Más allá de cuál sea el resultado de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Brasil, prevista para el 30 de octubre, la influencia del presidente Jair Bolsonaro en la política del país seguirá siendo fuerte en el futuro, luego de que muchos de sus aliados ganaran elecciones clave para el Congreso y los gobiernos locales.
Alrededor del 60% de los miembros de la Cámara Baja son ahora de partidos de derechas y de centro que apoyan al presidente. Bolsonaro también consiguió que varios antiguos miembros de su gabinete fueran elegidos para el Senado. Esto le garantiza una gran influencia en el Congreso tras un rendimiento mejor de lo esperado en las elecciones generales de Brasil del domingo.
Aun cuando su contrincante, el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, gane la segunda vuelta, Bolsonaro y el bolsonarismo podrían dificultar al próximo gobierno la aprobación de reformas o el nombramiento de miembros del poderoso Tribunal Supremo de Brasil. Los activos brasileños subían el lunes por la mañana al suponer que, en caso de ganar, Lula pivotará hacia el centro y dará prioridad a las políticas favorables a las empresas.
Lo que dice Bloomberg Economics
“El desempeño de Bolsonaro, más más fuerte de lo esperado, puede llevarlo a suavizar su retórica y a Luiz Inacio Lula da Silva a adoptar una agenda más pro-mercado con el fin de cortejar a los votantes moderados antes de la segunda ronda de votación. Es probable que los mercados reciban con satisfacción los cambios.”
-Adriana Dupita, economista para América Latina
En la Cámara Baja, el Partido Liberal que apoya a Bolsonaro ahora tiene la mayor cantidad de diputados tras sumar 19 nuevos legisladores, según datos preliminares del Tribunal Superior Electoral. Aunque el PL, como se conoce al partido, tradicionalmente apoya a quien gobierna el país, muchos de sus miembros que obtuvieron escaños en las elecciones del domingo están ideológicamente alineados con el presidente.
Bolsonaro, de 67 años, también se benefició de una sólida participación en las elecciones locales, con sus aliados ganando ocho de los 27 estados, incluido Río de Janeiro, con otros seis aún en juego en una segunda vuelta, incluido São Paulo, el más rico del país, donde uno de sus asesores más cercanos lidera los resultados. Controlar algunos de los principales estados de Brasil le dará un impulso al presidente mientras planea su campaña para desafiar a Lula en la segunda vuelta.
En total, Bolsonaro obtuvo el domingo más de 51 millones de votos, o el 43% de los votos válidos, frente al 48% de Lula. Sus tres hijos siguen siendo legisladores: Flavio Bolsonaro es un senador federal y Carlos Bolsonaro un representante del consejo en Río. E incluso cuando Eduardo Bolsonaro obtuvo menos de la mitad de los votos que recibió en 2018, aún así fue reelegido como diputado para São Paulo en la cámara baja.
Con la asistencia de Simone Preissler Iglesias.
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