Bogotá — En medio de una economía global cambiante y sin precedentes, las decisiones de los consumidores sobre qué, dónde y cuándo gastan actualmente nos permite entrever hacia dónde vamos.
El estudio “Shifting Wallets” del Mastercard Economics Institute analiza cómo los consumidores de todo el mundo se aferran a los hábitos que les ofrecen comodidad, experiencia o ambas combinadas.
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El más reciente estudio del Mastercard Economics Institute aplica medidas económicas y de alta frecuencia para responder tres cuestionamientos claves -qué, dónde y cuándo- sobre los cambios en los hábitos de consumo alrededor del mundo.
En América Latina y el Caribe los países analizados fueron Argentina, Brasil, Chile, Colombia, República Dominicana, Ecuador, México, Perú y Puerto Rico.
Los datos más relevantes de la región muestran que debido a que el alza de precios forzó a los consumidores a equilibrar sus gastos esenciales y discrecionales, los viajes y la alimentación han reinado en el discurso de los últimos años. Sin embargo, la postpandemia reactivó el gasto en actividades de esparcimiento.
Los consumidores siguen priorizando los viajes. En América Latina existe una preferencia por los vuelos domésticos y a lugares cercanos al país de residencia. Por ejemplo, los vuelos de corta distancia desde Colombia, República Dominicana, México y Puerto Rico están creciendo aproximadamente 2,3 veces más rápido que los vuelos de larga distancia. Especificamente, en agosto de 2022 se observó un incremento en reservas de viajes internacionales de corta distancia, en comparación con el mismo mes del 2019: Colombia (+99%), República Dominicana (+109%), México (40%) y Puerto Rico (46%).
Otro de los hallazgos es que las pequeñas empresas muestran ganancias en los servicios en línea. Los negocios que ofrecen servicios en la web - como clases particulares, y servicios de salud - crecieron entre 1.5 y 2 veces más rápido que las grandes empresas de servicios en línea. En América Latina, se destacan Brasil y Colombia, donde las compras en línea de servicios de pequeñas empresas aumentaron un 124% en agosto de 2022 frente a agosto de 2019, en comparación con las compras en línea de servicios de grandes empresas con un 53 % en el mismo período. En comparación, el crecimiento global de los servicios en línea pequeños frente a los grandes fue del 59% y el 34%, respectivamente, lo que destaca la rápida digitalización en América Latina.
Alrededor del mundo, los grandes almacenes superan con creces a las pequeñas empresas en el cambio a lo digital. En el sector minorista, las ventas de comercio electrónico de las grandes empresas crecieron un 66% frente al 27% de las pequeñas empresas con respecto a 2019. La brecha es particularmente evidente en las economías más desarrolladas, como Australia, Alemania, Hong Kong y Singapur.
En América Latina, los colombianos son un caso a observar. Tanto para los negocios en línea como en las tiendas físicas, de empresas grandes y pequeñas, el consumo aumentó un mínimo del 73% en agosto de 2022 en comparación con ese mismo mes de 2019. El mayor crecimiento se registró en tiendas fisicas para grandes empresas de servicios, donde se observo un 180% más en agosto de 2022 en comparación con agosto de 2019.
Asociar el gasto a determinados días de la semana ya es algo del pasado. El trabajo remoto y la digitalización de la vida borraron las fronteras, y ahora cualquier noche puede ser para salir y gastar. Esto tiene implicaciones a nivel de la cadena de suministro, tanto para comercios como para restaurantes y otros rubros.
La compra de bienes y las experiencias se colaron en la agenda semanal:
• En Chile y Colombia el gasto en salidas al cine y al teatro aumentó significativamente los miércoles y jueves, cada país experimentó un cambio de gasto de al menos un 3% en total en ambos días desde 2019 hasta 2022.
• En Argentina, los miércoles han aumentado en popularidad para los lugares para comer; el consumo en restaurantes aumentó los miércoles 1.3%, compensado por disminuciones durante los fines de semana en 2022 frente a la actividad típica observada antes de la pandemia.
“Estos cambios en los hábitos de consumo reflejan el nuevo ritmo de vida”, dice Bricklin Dwyer, economista jefe de Mastercard y director del Mastercard Economics Institute. “A pesar de estar lidiando con el aumento de precios, tasas de interés y la creciente incertidumbre económica, los consumidores siguen tomando decisiones en base a lo que consideran mejor para sus vidas.”