Ciudad de México — Las apuestas del peso mexicano en el Chicago Mercantile Exchange (CME) ligaron 16 semanas consecutivas apostando por la depreciación de la divisa.
Al cierre del 30 de septiembre, los contratos futuros del peso mexicano en la Bolsa de Chicago totalizaron en 41.300 contratos netos cortos, cada uno por MXN$500.000. La cifra representa una aceleración de 13.300 contratos netos cortos comparados con el total reportado la semana previa.
“Los especuladores ven más inquietudes ante un escenario más complejo y le apuestan más”, dijo el subdirector de Análisis Económico y Financiero en CiBanco, James Salazar.
Lo anterior ante la postura de endurecimiento por parte de la Fed y la expectactiva de que se esperan aumentos más altos en la tasa de interés.
El estratega sumó los factores de presión como el presupuesto de emergencia del Reino Unido por las dudas que genera sobre las implicaciones que pueda tener y de su financiamiento; y los conflictos geopolíticos entre Rusia y Ucrania.
La cifra se ubicó por arriba del estimado por los analistas de CiBanco que esperaban un total de 31.000 contratos netos cortos.
El dato corresponde al periodo comprendido del 21 al 27 de septiembre donde los principales catalizadores fueron los temores por una posible recesión económica ante una postura más agresiva y restrictiva por parte de la Reserva Federal de EE.UU.; y la espera del anuncio de política monetaria del Banco de México.
Durante el lapso mencionado, el índice dólar registró un repunte de 3,35% e incluso registró nuevos máximos de dos décadas al llegar a los 114,445 puntos, niveles observados en febrero de 2002.
La volatilidad mermó el desempeño del peso durante el lapso mencionado registrando una depreciación de casi 2% al pasar de MXN$19,9763 a $20,3707 por dólar, de acuerdo con datos de Bloomberg.
¿Escenario confuso?
Diversos analistas destacan la fortaleza que muestra el también llamado superpeso como un diferencial atractivo entre la tasa de interés de México y de la Fed, finanzas públicas sanas y un elevado flujo de remesas que favorecen la posición de la moneda local frente al dólar.
Sin embargo, el endurecimiento de la politica monetaria por parte de la Reserva Federal presionará al peso mexicano, pero en menor medida.
“Los especuladores observan más probabilidades a depreciarse y coincide con el promedio que traemos la mayoría de analistas de una depreciación hacia final de año y principios de otro”.
El 29 de septiembre, el Banco de México anunció un incremento en 75 puntos base en la tasa de interés para ubicarla en 9,25%. Este nivel representa un diferencial de 625 puntos base con el referencial de EE.UU., cifra que indica que el premio por invertir en activos denominados en pesos luce atractivo para los inversionistas.
CiBanco estima que el peso mexicano cerrará el año en un nivel de $20,40 por unidad, nivel que representa una depreciación de 1,37% desde la cotización intradía de MXN$20,12 por unidad (Ciudad de México 14:34 horas).