Bloomberg — La lira turca se debilitó a un nuevo mínimo este jueves, luego de que el banco central llevara a cabo una sorpresiva reducción de sus tasas de interés. También contribuyó el contrastante contexto internacional, dado que la Reserva Federal siguió con su ciclo de endurecimiento monetario el miércoles.
La divisa se debilitó hasta 0,4%, a 18,4026 unidades por dólar estadounidense, el nivel más bajo registrado, antes de reducir algunas pérdidas.
La poco convencional política monetaria del país ha hecho que tenga la tasa real más negativa a nivel global una vez ajustadas las cifras por inflación, que superó el 80% el mes pasado. La divisa está entre las que han mostrado el peor rendimiento en los mercados emergentes.
El banco central turco redujo las tasas del 13% al 12% el jueves, un segundo recorte en meses consecutivos que sorprende a los analista: solo 5 de los 22 encuestados por Bloomberg lo habían previsto.
Es probable que se produzcan más recortes de tasas en los próximos meses debido a los retos que plantea el crecimiento económico en la región, según Marek Drimal, de Societe Generale, que esperaba un recorte de 50 puntos básicos hoy. “Sin embargo, es probable que las presiones de debilitamiento en el mercado de la lira se acentúen después de la temporada turística de verano”, dijo Drimal, anticipando que el par USD/TRY alcanzará los 22 a finales de año.
Una Fed más agresiva
La lira ya se encontraba en una situación de debilidad frente al dólar tras la decisión de la Reserva Federal del miércoles de elevar su tasa de interés de referencia en 75 puntos básicos, al tiempo que señalaba un nuevo endurecimiento agresivo.
“En términos generales, la subida de la Reserva Federal refuerza la fuerte tendencia del dólar a nivel mundial”, dijo Todd Schubert, jefe de investigación de renta fija del Bank of Singapore Ltd. “Sin embargo, la lira tiene su propio bucle de retroalimentación negativa que es la política poco ortodoxa del banco central turco, que está exacerbando la debilidad de la TRY”.
La lira se ha debilitado cerca de un 28% este año, siendo la segunda moneda de mercados emergentes con peor comportamiento, después del peso argentino.
Lea más en Bloomberg.com