Bloomberg — Nancy Pelosi condenó lo que calificó de “ataques mortales” contra el territorio armenio por parte de Azerbaiyán, tras una reunión celebrada el domingo con funcionarios armenios en Ereván.
Pelosi, la primera presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU. que visita el país del Cáucaso meridional, habló en una conferencia de prensa con su homólogo armenio. Su descripción de los hechos fue rechazada por Azerbaiyán.
Su visita, a menos de ocho semanas de las elecciones de mitad de período en Estados Unidos, en las que está en riesgo la mayoría del Partido Demócrata en la Cámara de Representantes, formaba parte de un viaje que también la llevó a la Cumbre de Presidentes del G-7 en Berlín.
Sus comentarios se produjeron tras los enfrentamientos en la frontera entre Armenia y Azerbaiyán, que comenzaron en la madrugada del 13 de septiembre y en los que murieron más de 200 soldados de ambos bandos. Estados Unidos, Rusia y Francia fueron algunos de los países que instaron a un alto el fuego.
“La seguridad territorial y la soberanía de Armenia es un valor para Estados Unidos. Deberíamos utilizar nuestra influencia y nuestro poder para apoyarla”, dijo Pelosi.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Azerbaiyán rechazó la valoración de Pelosi sobre quién había sido el agresor por considerarla “infundada”.
Azerbaiyán no atacó a Armenia y, en cambio, tomó medidas para defender sus fronteras tras la provocación armenia, dijo el ministerio en una declaración enviada por correo electrónico.
“Declaraciones infundadas como éstas no ayudan a fortalecer la frágil paz en la región. Al contrario, agravan las tensiones”, dijo el ministerio.
Entre la delegación de Pelosi se encontraban tres miembros del grupo del Congreso para asuntos armenios, entre ellos las representantes demócratas Jackie Speier y Anna Eshoo de California, ambas de ascendencia armenia.
Armenia y Azerbaiyán se culpan mutuamente de haber iniciado los combates que se convirtieron en el peor enfrentamiento desde la guerra de 44 días por el territorio en disputa de Nagorno-Karabaj en 2020. Ese conflicto dejó miles de soldados muertos en ambos bandos hasta que el presidente ruso Vladimir Putin ayudó a negociar una tregua.
Azerbaiyán entregó los cuerpos de 32 soldados muertos en el último conflicto, según el Ministerio de Defensa de Armenia.
La última tregua, negociada por Estados Unidos, se está cumpliendo, según el presidente del Parlamento armenio, Alen Simonyan, que pidió sanciones contra Azerbaiyán para detener lo que llamó “ataques autoritarios contra la democracia de Armenia”.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, cuyo país ayudó a Azerbaiyán a ganar la guerra de 2020, dijo a los periodistas el sábado que Azerbaiyán había “anunciado la finalización de la operación militar.”
Erdogan se reunió con el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, en la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai en Samarcanda (Uzbekistán), según el medio de comunicación ruso Ria Novosti.