Bloomberg — “Los precios se disparan, ése es el mayor peligro para el crecimiento económico: socava la esencia de nuestra economía”, dijo Lindner a la cadena pública alemana ARD en una entrevista el domingo.
El ministro agregó que “no podemos combatir la inflación con dinero prestado, como hicimos con la pandemia del coronavirus”.
La tasa de inflación de Alemania alcanzó el 8,8% el mes pasado -el nivel más alto desde la introducción del euro-, avivada por la subida de los precios de la electricidad. El presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, ha dicho en repetidas ocasiones que el crecimiento de los precios al consumo podría alcanzar los dos dígitos a finales de este año y el sábado advirtió que Alemania se enfrentaba a un “duro invierno”.
Los Demócratas Libres de Lindner, favorables al mercado, forman parte de la coalición gobernante del canciller Olaf Scholz, que ha prometido unos 100.000 millones de euros (100.000 millones de dólares) en medidas de ayuda para proteger a los hogares y las empresas de la subida de los precios.
Aun así, el ministro de Economía ha dicho en repetidas ocasiones que Alemania debe volver a las normas constitucionales que limitan el endeudamiento, conocidas como el “freno de la deuda”, en 2023.
“La lucha contra la inflación siempre va asociada a una desaceleración económica temporal, pero ese es el precio de detener esta inflación”, según Lindner.
“Lo que podemos hacer es proteger las empresas sanas, los medios de vida sanos” y “debemos amortiguar las dificultades sociales de la gente: nadie se congelará en invierno ni pasará hambre por razones financieras”, dijo. “Pero no podemos trabajar con dinero prestado como hicimos durante la pandemia de coronavirus”.