Bloomberg Línea — El Municipio de Quito decidió una extinción masiva de obligaciones tributarias, que beneficiará a miles de contribuyentes que contaban con deudas impositivas. Así lo comunicó el propio director metropolitano tributario, Gonzalo Lascano.
El funcionario señaló que se necesitan dos requisitos fundamentales para ser alcanzados por esta medida que permite la eliminación de la deuda:
- Que sean montos menores a una remuneración básica unificada (es decir, US$425)
- Que se haya cumplido el tiempo de prescripción, es decir, 5 y 7 años, independiente de tener coactiva o no.
La extinción “es para todas las obligaciones tributarias que cumplan estos dos requisitos”, señaló Lascano.
Listado oficial
Según se detalla en la web oficial del Municipio de Quito, “la Dirección Financiera emitirá un listado con estas obligaciones, luego de una depuración de esta información y se hará constar de manera individual cuáles son las que se liquidarán”.
En total se liquidará 129 mil acciones tributarias, por una cifra equivalente a US$80 millones. Las autoridades explicaron que esta extinción aplica para lo tributario municipal: impuesto predial,1.5 por mil, patentes, etc.
Lascano subrayó que este anuncio refiere exclusivamente se refiere a obligaciones tributarias y no a otro tipo componentes. Se exceptúan pagos administrativos y aranceles generados en otras dependencias o empresas municipales.
Procedimiento
Las personas no deberán presentar ninguna solicitud ni reclamo, ya que la extinción se llevará a cabo de forma automática.
Por otro lado, el Lascano consignó que “la extinción masiva se refiere a todas las obligaciones que una persona pueda tener, es decir, aplica al concepto, de tal forma que beneficia a los usuarios que podrían tener varias deudas pendientes”.
Dicho beneficio se aplica acorde al Código Tributario que prevé la extinción masiva de deudas tributarias y la municipalidad cumple con la Ley.
Cartera “más saludable”
Las autoridades señalaron que esta extinción masiva de deudas “genera una cartera más saludable para el Municipio” y que desde ahora “comenzará el cobro de otros pendientes y deudas”.
Lascano aclaró que un ciudadano no puede decir “no pago los impuestos porque en 5 años me liquidan la deuda”, dado que, según su óptica, “esa conducta comporta un riesgo de coactiva y el Municipio, en ejercicio de sus facultades de recaudar tributos, conllevaría multas y/o coactivas”.
“Esto no puede entenderse como un incentivo para no pagar tributos, más bien es un compromiso ciudadano para cumplir la ley”, resumió.