Buenos Aires — Cada vez que se habla de inversiones en Argentina el litio figura como denominador común. La utilización de este recurso para fabricar celdas de baterías eléctricas, en un mundo que va cada vez más rápido hacia la electromovilidad, convirtió al norte argentino ─segunda reserva de litio del mundo y cuarto productor mundial─ como una oportunidad de negocios, y eso se refleja en las operaciones de este año.
Ante los desafíos que enfrenta este mercado, con un precio spot que ha alcanzado máximos históricos, y con pronósticos que advierten por la alta demanda y la falta de oferta ─que irá in crescendo con el correr de los años─, Argentina apuesta a ser protagonista y aunque en la actualidad cuenta con apenas dos proyectos en operación, las proyecciones para los próximos años son optimistas.
En ese sentido, ya son varias las marcas de autos que han puesto su mirada en el país para contar con el recurso que se extrae y procesa de la salmuera argentina y son varias las que ya han firmado sus acuerdos para acceder en el futuro.
Acuerdos con Livent
Livent, minera estadounidense, es una de las dos empresas que producen litio en el país. Sospechada por subfacturar exportación, sus proyectos de expansión continúan en marcha y fueron conversados la semana que pasó entre el ministro de Economía, Sergio Massa y el CEO de la compañía, Paul Graves.
Actualmente, el proyecto Fénix en Catamarca ─explotado por Livent─ proveé de carbonato de litio a Tesla, la empresa de autos eléctricos de Elon Musk, cuyas autoridades visitaron la planta en marzo de este año.
También proveé a BMW. La automotriz alemana anunció un acuerdo para abastecerse de litio en Argentina por más de 300 millones de dólares en los próximos años desde 2022. Livent anunció este año que expandirá su operación para producir 20.000 toneladas más.
“Luego de esta expansión, que se espera que esté completa antes de fines de 2025, las operaciones de Livent en Argentina tendrán una capacidad total anual de carbonato de litio de 60.000 toneladas y 9.000 toneladas de cloruro de litio”, comunicaron desde la empresa.
Testa y BMW no son las únicas. Semanas atrás, General Motors mostró su interés en el Proyecto Fénix y anunció un acuerdo con Livent que proporcionará hidróxido de litio de grado de batería a GM durante un período de seis años a partir de 2025.
El hidróxido de litio de Livent se usará en los cátodos de batería Ultium de GM, que impulsarán vehículos eléctricos como el Chevrolet Blazer EV, Chevrolet Silverado EV, GMC Hummer EV y Cadillac Lyriq ,recientemente revelados, según confirmó la empresa.
El litio de jujuy
Sales de Jujuy, es el otro proyecto en el que actualmente se extrae y procesa litio. Es operada principalmente por Allkem ─empresa australiana que surge tras la fusión de Galaxy y Orocobre─. Ubicado en Olaroz, participan también de esta empresa Toyota Tsusho Corporation (TTC) y la provincial Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado (Jemse).
Desde Allkem contestaron a Bloomberg Línea que “el carbonato de litio grado batería que producimos se destina en parte a vehículos eléctricos en distintos mercados, no tenemos precisión de las marcas de automotrices que lo utilizan”.
No obstante, en el consorcio de empresas que conforman este proyecto está Toshota Tsuyo, que forma parte del grupo Toyota. En 2020, Orocobre firmó un Memorando de Entendimiento junto a Sales de Jujuy, Toyota Tsusho Corporation, Toyotsu Lithium Corporatión y Prime Planet Energy Solutions (PPES) para el suministro de hidróxido de litio y carbonato de litio para su uso en la cadena de producción de baterías de PPES., una empresa conjunta al 51% y 49% entre Toyota Motor Corporation y Panasonic.
De esta forma, se acordó suministrar a PPES hasta 30.000 toneladas de carbonato de litio al año para 2025, con entregas que comenzaron en 2021.
Este litio también llega a los autos eléctricos de Toyota, que aún no se comercializan en Argentina. Actualmente, la estrategia de la compañía en el país está volcada a los autos híbridos, cuyo componente eléctrico está compuesto por níquel y metal-hidruro, en el caso del Corolla. No obstante, la empresa japonesa tiene en sus objetivos sumar una nueva tecnología para comercializar en Argentina desde el próximo año.
Otra compañía interesada en el litio que se produce en Jujuy es EnergyX, dedicada a sumar tecnologías innovadoras de procesamiento y extracción directa de litio, y soluciones de almacenamiento de energía y baterías más efectivas. Su CEO, Teague Egan, visitó el proyecto meses atrás. Actualmente, la empresa está probando toneladas métricas de salmuera Allkem en sus máquinas piloto de laboratorio.
Apostando al futuro
En marzo de este año, la minera australiana Río Tinto confirmó la compra del proyecto Rincón, en Salta, por una suma de US$825 millones. La planta instalada en este proyecto estaría lista para producir 3.000 toneladas de carbonato de litio desde 2024 y ya está en análisis la construcción de una segunda planta con mayor capacidad, en la cual ya tienen un acuerdo de entendimiento con Ford para la fabricación de celdas de baterías eléctricas.
Un proyecto del que se esperan avances en el corto plazo es el de Cauchari, en Jujuy, operado por Exar, compañía conformada por la canadiense Lithium Americas y la estatal Jemse. En este proyecto ha volcado su interés la automotriz japonesa Mitsubishi, que también apuesta al litio argentino una vez que esta planta esté en producción, según múltiples reportes.
¿Y las otras marcas?
Consultada por Bloomberg Línea, desde Renault Group contestaron que la empresa francesa “tiene una estrategia clara respecto de la electrificación de sus vehículos y es líder en el desarrollo de esta tecnología desde hace más de 20 años”.
Según precisaron, Renault “tiene claramente identificado a la Argentina como un potencial proveedor de litio”.