Montevideo — El gobierno uruguayo estableció mediante un decreto cambios a las normas antitabaco que rigen en el territorio. Las modificaciones habilitaron la venta de productos en las denominadas cajas “blandas”, cuando hasta ahora debían ser de cartón con tapas tipo “flip-flop”, y además tanto los cigarrillos como el interior de la cajilla podrán “incorporar elementos distintivos destinados a determinar la adulteración del producto”, señaló la nueva norma.
El decreto del presidente Luis Lacalle Pou emitido por el Ministerio de Industria planteó así modificaciones a un decreto anterior del año 2019, durante la administración de Tabaré Vázquez.
La normativa anterior prohibía “el uso de cualquier otro tipo de material” que no fuera cartón para el paquete de cigarrillos. Además, establecía que el envoltorio del cigarrillo debía ser de papel blanco liso y prohibía “cualquier clase de logo o cualquier otra característica o elemento de diseño, leyenda, inscripción o escritura”.
El nuevo decreto, modificativo, señaló que “en el cigarrillo o en el interior de la cajilla el fabricante podrá incorporar elementos distintivos” destinados a determinar su trazabilidad.
En la parte argumentativa del decreto, el gobierno señaló que “las limitaciones” de la normativa vigente hasta el momento “afectan al cigarrillo comercializado en el mercado formal frente a la fuerte competencia del cigarrillo de contrabando”.
El gobierno señaló que “imponer como única versión comercializable la cajilla dura” excluía a la cajilla blanda, “tradicionalmente la de mayor venta en el mercado”, y cuyas características “le permiten competir más efectivamente con aquellas mayoritariamente del mismo tipo que ingresan de contrabando”.
