Bloomberg Línea — La crisis económica que desencadenó la pandemia del Covid-19 y la alta inflación que se ha visto en lo que va de 2022 en la mayoría de países de América Latina han llevado a que las personas se estén preguntando sobre qué hacer para que sus ahorros no pierdan valor al estar guardados en su casa o fuera de algún producto financiero.
Para estos fines, dos de los instrumentos financieros más comunes son los Certificados de Depósito a Término (CDT) y los Fondos de Inversión Colectiva (FIC), que aunque tienen diferentes características, figuran como opciones prácticas, seguras y fáciles de entender para la mayoría de personas.
Con el fin de evaluarlos, Bloomberg Línea consultó a expertos que detallaron las posibilidades que brinda cada producto financiero y la forma en que se adapta para que un ciudadanos utilice sus ahorros o incluso diversifique su portafolio, sin que se trate de una recomendación específica de inversión.
¿Cómo funciona un CDT?
Los depósitos de dinero a término fijo son una inversión en la que la personas define con anticipación por cuánto tiempo dejará que el capital esté en poder del banco o entidad financiera, y además, sabrá desde el momento en que se concreta, la tasa de interés o el rendimiento que tendrá la inversión.
En la actualidad, cuando las tasas de interés que definen los bancos centrales están altas, los CDT figuran como una buena opción para invertir un capital o destinar allí los ahorros, pues los bancos suben también sus tasas de interés y este instrumento suele tener buenas rentabilidades.
José Martínez, director comercial de Mejor CDT, explicó a Bloomberg Línea que hay dos formas de invertir en este producto financiero: una opción es que “la persona recibe los intereses o los rendimientos periódicamente, todos los meses, cada trimestre o cada semestre, o que reciba esos intereses al término de la inversión. En cuanto al tipo de CDT no cambia mucho, puede ser un CDT físico o desmaterializado (virtual)”.
Al hablar de los ahorros, Martínez señala que un CDT es un buen instrumento, pues se trata de una inversión en donde se puede tener un fondo de emergencia y un dinero que está seguro, rentando a tasas que pueden no ser las más altas del mercado pero que tienen la seguridad de que no van a perderse y que en tiempos de altas tasas de interés, rentan más que la inflación.
“En Colombia, es el momento para ahorrar en un CDT porque son las tasas más altas en los últimos 20 años para este instrumento”, precisó, señalando que las tasas de retorno están por encima de la inflación (según el plazo en que se deposite el dinero). La inflación llegó en agosto a 10,84% a nivel interanual, según reveló el Dane.
Sin embargo, señaló que un instrumento de renta fija similar en otros países o en Estados Unidos, que es el país a donde se están dirigiendo muchas personas para mantener sus ahorros y resguardarse de la volatilidad, “no es recomendable este tipo de inversión”, pues las tasas están por debajo de la inflación en ese país.
¿Y las inversiones en los Fondos de Inversión Colectiva (FIC)?
Este instrumento es un mecanismo de inversión administrado por fiduciarias y fondos de pensiones, principalmente en Colombia. En estas carteras colectivas la rentabilidad de la inversión no siempre está asegurada, puede salir mejor o peor de lo que la persona espera, pues son una inversión valorada a precio de mercado y permite tener una rentabilidad más competitiva con montos bajos.
Los FIC “entregan mayor ventaja en liquidez al no estar atados, salvo contadas excepciones, a términos fijos. A lo que se suma, finalmente, que al no estar concentrados en un solo emisor el riesgo crediticio es menor”, señaló a Bloomberg Línea Catalina Tobón, gerente de estrategia de Skandia Colombia.
En las carteras colectivas hay diferentes tipos: FIC abiertos, FIC cerrados, FIC con énfasis en instrumentos líquidos, FIC que invierten en bonos de mayor plazo al vencimiento, FIC que invierten en fondos inmobiliarios o fondos de crédito, y FIC que invierten en acciones.
En cuanto a un portafolio de inversión y su diversificación, cada instrumento puede complementar la posición de un inversionista y esta depende de múltiples factores.
Desde Skandia, Tobón precisó que los CDT ahora tienen tasas atractivas pero este no es siempre el caso, mientras que los FIC en escenarios de tasas bajas tienen mayor rentabilidad y usualmente una mayor liquidez derivada de su flexibilidad (a menos de que sea un FIC cerrado con pacto de permanencia).
Frente a los tiempos de altas tasas de interés, Tobón destacó que mejor que un CDT puede ser un CAT, que son fondos de inversión que emulan el funcionamiento de los CDT y logran tasas competitivas con inversiones no mayores a los COP$4 millones, “pues el que hace la negociación es el estructurador del CAT y al permitir estructurar con más de un emisor, este mecanismo permite diversificar el riesgo crediticio”.
¿Convienen los instrumentos financieros fuera del país o en EE.UU.?
Con la alta volatilidad de las monedas de América Latina frente al dólar estadounidense, en especial por las proyecciones de desaceleración económica y posibles escenarios de recesión, se ha vuelto común que las personas estén pasando sus ahorros a dólares como una moneda refugio y, además, abrir cuentas bancarias o invertir en el extranjero. Sin embargo, esto tiene diferentes implicaciones que hay que conocer antes.
“Al buscar instrumentos similares en otros países se está teniendo una protección frente a la volatilidad de la moneda nuestra (el peso frente al dólar) más no frente a la volatilidad del dólar. Si uno abre un equivalente a un CDT en Estados Unidos, la tasa que van a dar es muy baja, incluso por debajo de la inflación. Es un buen instrumento pero no va a ser muy grande la rentabilidad, ahí lo que se está haciendo es protegerse frente a la moneda local, los cambios en el dólar y en ese sentido sí es una herramienta interesante”, añadió José Martínez de Mejor CDT.