Bloomberg — El candidato presidencial en Brasil Luiz Inácio Lula da Silva pidió una revisión radical de las políticas de Brasil hacia la Amazonia tras años de fricción con la comunidad internacional por la aceleración de la deforestación.
Tras reunirse esta semana con líderes locales en la selva tropical del norte de Brasil, Lula dijo que reforzará la protección del medio ambiente y los derechos de los indígenas sobre la tierra si gana las elecciones del mes que viene.
Bajo el mandato del presidente Jair Bolsonaro, la creciente destrucción de la mayor selva tropical del mundo ha resquebrajado los lazos con los aliados y socios comerciales de Brasil, y ha suscitado las críticas de ONG y personalidades. Lula, que fue presidente entre 2003 y 2010, se encamina a derrotar a Bolsonaro en la votación, según los sondeos.
”Aunque la Amazonia es territorio soberano de Brasil, la riqueza que produce tiene que ser utilizada por todos los habitantes del planeta Tierra”, dijo en un acto de campaña en el estado de Amazonas.
En Belem, capital del estado amazónico de Pará, Lula asistió a rituales religiosos de grupos indígenas y se reunió con descendientes de esclavos africanos y pescadores que trabajan en los ríos.
Algunos pronunciaron discursos en lenguas indígenas pidiendo más protección contra los invasores violentos. La antropóloga Beatriz Matos entregó a Lula una carta en la que pedía más seguridad para los indígenas aislados. Es la viuda del activista indígena Bruno Pereira, asesinado en la Amazonia junto al periodista británico Dom Phillips en junio.
Récord en deforestación
La deforestación en la Amazonia brasileña alcanzó un récord en el primer semestre de 2022. Bolsonaro es popular entre los ganaderos y sojeros que han colonizado franjas del vasto interior de Brasil.
Desde que asumió el cargo en 2019, Bolsonaro relajó las inspecciones ambientales, y fomentó la explotación de áreas indígenas y de conservación. Izabella Teixeira, asesora de Lula en temas ambientales, dice que reconstruir las asociaciones internacionales de Brasil debe ser una de las prioridades del próximo presidente.
Lula ha dicho que nombrará un enviado especial para el clima que ayude a reparar la imagen medioambiental de Brasil en el extranjero.Lula también se ha comprometido a crear un Ministerio de Pueblos Originarios para representar a los indígenas y a los descendientes de los esclavos africanos.
Mercado de carbono
Algunos aliados del ex presidente han pedido que Brasil forme un bloque con Indonesia y el Congo, países con grandes bosques tropicales, para aumentar su fuerza en los foros internacionales.
Una prioridad para un posible gobierno de Lula es la regulación del mercado de carbono, convirtiéndolo en un instrumento para que los países ricos paguen por la preservación del medio ambiente en las naciones en desarrollo, según Aloizio Mercadante, coordinador de la campaña de Lula.
”Buscamos regular este mercado para que Brasil y otros países con grandes bosques tropicales puedan empezar a emitir créditos”, dijo Mercadante en una entrevista. “Tenemos que encontrar la manera de hacerlo”.(Añade la entrevista con el coordinador de la campaña de Lula a partir del 12º párrafo).
-Con la ayuda de Bruna Lessa.
