Guatemala — Sergio Recinos, presidente del Banco de Guatemala y de la Junta Monetaria informó que por unanimidad acordaron aumentar el nivel de la tasa de interés líder de política monetaria en 50 puntos básicos, por lo tanto, pasó de 2.25% a 2.75%.
Luego evaluar el Balance de Riesgos de Inflación, decidió, por unanimidad aumentar 0.5% la tasa líder de la política monetaria, y se convirtió en la tercera ocasión en que se incrementa la tasa de referencia en el año, pues desde junio de 2020 se ubicaba en 1.75%, pero en mayo pasado subió a 2% y en julio a 2.25%.
Alto nivel de incertidumbre
En el entorno externo, la Junta Monetaria destacó que las perspectivas de crecimiento económico a nivel mundial, aunque son positivas para 2022 y 2023, son menores a las previstas anteriormente, en un entorno de altos niveles de incertidumbre y riesgos a la baja.
Asimismo, tomó en cuenta que la inflación a nivel internacional permanece alta, debido, fundamentalmente, a los elevados precios internacionales de las principales materias primas, al conflicto Rusia-Ucrania y a la lenta normalización de las cadenas mundiales de suministro.
“El aumento de 50 puntos básicos de la tasa líder busca enviar un mensaje contundente a los agentes económicos, sobre el compromiso de la JM para contener las presiones inflacionarias, pero sin afectar el crecimiento económico”, aseguró Recinos.
Por su parte, los precios internacionales del petróleo, del trigo y del maíz amarillo se ubican por encima de los niveles observados en los últimos años y las proyecciones disponibles anticipan que, en el escenario base, los precios medios de estas materias primas continuarían siendo superiores a los observados en 2021.
Aspectos locales, también influyeron
En el ámbito interno, la Junta Monetaria resaltó que el comportamiento que mantiene la mayoría de indicadores de corto plazo de la actividad económica (Índice Mensual de la Actividad Económica, crédito bancario al sector privado, remesas familiares y comercio exterior, entre otros), es congruente con el rango de crecimiento económico previsto para el presente año (entre 3.0% y 5.0%).
Por otra parte, enfatizó que los choques de oferta externos sobre los precios de los energéticos y los alimentos han generado efectos de segunda vuelta, reflejados en incrementos adicionales en los pronósticos y las expectativas de inflación para 2022 y 2023.