Bloomberg — Los países que conforman la UE están de acuerdo en encarecer y dificultar los viajes de los turistas de Rusia a la zona, aunque no prohíben totalmente los visados.
En declaraciones a la prensa tras una reunión en Praga de los ministros de Asuntos Exteriores de la UE, Josep Borrell, jefe de política exterior del bloque, dijo que “esto disminuirá notablemente el número de nuevos visados expedidos por los países miembros”.
El cada vez mayor número de cruces en las fronteras desde Rusia a partir de la mitad de julio “ha supuesto un peligro para nuestra seguridad”, afirmó Borrell. Un gran número de rusos acudía a la UE para realizar sus compras “como si la guerra no estuviera en curso en Ucrania”, indicó, y añadió que los países miembros “consideran que la situación, no es la habitual”.
La reunión de los ministros de Asuntos Exteriores se celebró en un ambiente de división sobre la posibilidad de prohibir los turistas rusos por la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Mientras los estados bálticos y Polonia amenazaban con actuar de forma unilateral si el bloque no se ponía de acuerdo sobre la exclusión de los turistas rusos, otros representantes, como el alemán y el francés, pedían más prudencia.
Durante las conversaciones del miércoles, el ministro de Relaciones Exteriores checo, Jan Lipavsky, instó a sus homólogos en la sala a dejar de emitir visas de turistas y también prohibir a los turistas que ya tienen una visa de la UE, según una persona familiarizada con el asunto. Lipavsky sugirió que se podrían incluir más medidas para limitar el tráfico de turistas desde Rusia en un nuevo paquete de sanciones.
Los estados bálticos han estado presionando para prohibir la visa en medio de una afluencia de turistas rusos que cruzan a la UE a través de sus fronteras. Polonia, Estonia, Lituania y Letonia dijeron en una declaración conjunta antes de la reunión que están considerando introducir “medidas temporales a nivel nacional” para limitar la cantidad de ciudadanos rusos que ingresan al bloque y al área Schengen a través de sus fronteras.
Funcionarios que son el objetivo
La ministra de Relaciones Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, advirtió contra una política de visas demasiado restrictiva antes de la reunión del miércoles y dijo que era importante apuntar a los funcionarios rusos y a quienes se benefician de la guerra, pero continuar permitiendo que otros que no apoyen al régimen viajen a Europa. Un documento de discusión que Alemania redactó con Francia y distribuyó a los estados miembros advirtió contra las restricciones de viaje de gran alcance que podrían alimentar la narrativa rusa.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo el martes que si la UE seguía adelante con la prohibición de los visados de turista para los rusos, “esto no podía quedar sin respuesta” por parte de Rusia, sin detallar las posibles represalias. Peskov calificó las medidas propuestas de “conjunto de irracionalidades que rozan la locura”.
Con los vuelos prohibidos hacia y desde la UE, los rusos en su mayoría han tenido que ingresar al bloque por tierra, principalmente a través de Finlandia y los países bálticos.
Alrededor de un millón de ciudadanos rusos ingresaron legalmente a la UE desde que Rusia invadió Ucrania el 24 de febrero, con aproximadamente dos tercios ingresando a través de las fronteras de Estonia o Finlandia, según la agencia fronteriza de la UE, Frontex. Una vez que cruzan a la UE con una visa Schengen, son libres de viajar por la zona libre de fronteras dentro de Europa.
Con la asistencia de Katharina Rosskopf.
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