Caracas — Dispuesto a implementar una tónica más relajada, el recién juramentado embajador de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti, fue recibido en Venezuela el domingo, en un esfuerzo por reanudar las relaciones entre ambas naciones, interrumpidas desde 2019.
En una fugaz pero certera primera visita, que se extendió por tres días, Benedetti, hombre de confianza del presidente colombiano, Gustavo Petro, sostuvo encuentros con Nicolás Maduro; el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López; el presidente de la Asamblea Nacional electa en 2020, Jorge Rodríguez; el ministro de Petróleo y presidente de Pdvsa, Tareck El Aissami, e incluso el primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, Diosdado Cabello.
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Además de encontrarse con un chavismo expectante, pero temeroso ante una nueva era diplomática con el país vecino, Benedetti, que estará en un ir y venir mientras la sede y la residencia diplomática son reacondicionadas para su estadía, ha sido sorprendido por el optimismo ciudadano, de quienes confían en una reapertura de las fronteras para la reactivación comercial.
En entrevista para Bloomberg Línea, el exsenador comentó sobre los planteamientos que presentó en el Palacio de Miraflores, las reuniones que ha venido incorporando en su agenda con consejeros económicos estadounidenses para la triangulación de las relaciones y el eventual regreso de Monómeros a la administración chavista.
P: ¿Qué tan difícil ha sido para usted, desde el punto de vista personal, asumir esta responsabilidad, teniendo en cuenta que Maduro y su gobierno son condenados muy duramente por la opinión pública internacional y no existe consenso en torno al tema?
R: Sí, claro. La responsabilidad y el costo político se da porque se da. A pesar de que en mi país ha habido buena difusión y han estado muy pendientes de lo que sucede en Venezuela, al mismo tiempo, la oposición dice que somos chavistas, que estamos con el régimen.
P: Para algunos analistas, la premura en la restitución de las relaciones bilaterales obedece más a razones ideológicas que pragmáticas. ¿Qué piensa?
R: No. Petro no ha cumplido un mes de presidente y ya a las tres semanas yo estaba aquí, y además ha sido un poco tortuoso. Aquí han abandonado los consulados, la casa privada, no han nombrado la nómina y hasta en eso debo ponerme pilas. No ha sido fácil. Y el costo político puede ser bastante alto, ante la xenofobia contra Venezuela que se ha expandido y la estigmatización del gobierno.
P: Sobre la reactivación aérea entre ambas naciones, y la reapertura en frontera, ¿se tiene alguna fecha establecida? ¿Qué hace falta?
R: Yo le propuse al presidente Maduro que por favor lo hiciéramos lo más rápido, que yo proponía levantar en tres o cuatro meses la frontera, me dijo que no. Le dije: ¿Qué te preocupa? Me dijo que el tema del narcotráfico, la inseguridad.
P: ¿No hay mayor narcotráfico con el cierre?
R: Yo también digo lo mismo. Si abrimos la frontera, le restamos a las mafias, a la explotación sexual, al paso ilegal por las trochas, al narcotráfico.
P: ¿Qué hace falta?
R: Creo que hace falta que se pongan de acuerdo los cancilleres y que se den tranquilidad entre los gobiernos. Cada uno tendrá sus prevenciones muy altas, por toda la historia que pasó, que casi llegamos a entrar en guerra.
“Yo le propuse ayer al presidente Maduro que por favor lo hiciéramos lo más rápido, que yo proponía levantar en tres o cuatro meses la frontera, me dijo que no”.
Armando Benedetti, embajador de Colombia en Venezuela.
P: ¿Cuál es el plan para la reactivación?
R: Hay que crear una zona económica en la frontera, unas excepciones de impuestos en los negocios, sobre todo para los colombianos, al mismo tiempo una legislación con la que puedas invertir en obras que sean de Venezuela para que impacten y conecten la zona, hospitales, puentes, creo que eso hay que construirlo y después la confianza, que yo creo que se perdió completamente y la enemistad entre algunos sectores.
P: ¿Cree que Colombia es el más interesado en que se reabra la frontera?
R: Sí, claro. Por eso estoy aquí, para brindar confianza, que no somos hostiles, que Colombia es la más interesada. Desde 2005-2006, que las actividades comerciales dejaban a Colombia entre 6.000 millones de dólares, al año después del conflicto, solamente 150 millones de dólares. Imagina la cantidad de personas que se vio afectada.
P: ¿Qué garantías legales e institucionales tendrán las empresas colombianas una vez que se restablezcan las relaciones comerciales?
R: Está el Swift, hay que crear un mecanismo para que se pueda dar.
P: ¿Cuánto puede tardar?
R: Creí que podría ser unas semanas, pero por lo que he hablado con el gobierno venezolano y el propio colombiano, no sabría decir alguna fecha. Yo quisiera que en dos o tres meses eso pudiera estar establecido.
P: En Colombia, son más de 2 millones de venezolanos migrantes, cree que con esta reactivación aérea y reapertura de frontera, ¿ese número pueda incrementar?
R: No creo. En 2018 me eligieron senador y políticamente no era bueno defender a los venezolanos por la xenofobia, yo lo hice y, además de eso, fui muy crítico al gobierno de Duque por lo que hizo con la frontera. Tú vas a cualquier bar y casi todas son mujeres explotadas venezolanas y hay gente también a la que le pagan menos salarios, y eso es un tema que con este gobierno también lo vamos a trabajar.
P: Usted se ha referido a conversaciones con Estados Unidos con respecto a Venezuela. ¿El gobierno de Petro respetará las sanciones de EE.UU. y la UE en relación al gobierno venezolano o abogará por el alivio?
R: Nosotros vamos a abogar. Ya lo hicimos en la CAN y estamos también en la CAF, buscando soluciones. Eso por un lado, y por el otro, Colombia cuando reconoce al gobierno no tiene por qué estar pendiente de las sanciones. Y yo me he reunido con los consejeros económicos de la embajada de Estados Unidos en Colombia y en Venezuela, y básicamente les dije que cualquier proceso tenía que ir de la mano de ellos, que no los iba a sorprender, que hasta aceptaba deliberar con lo que estaba pasando, nunca para tomar una decisión, pero sí para hacerles entender qué estaba pasando. Tengo una reunión con el embajador de Estados Unidos en Venezuela para tratar esos temas.
P: ¿Dejará de ser Colombia un aliado estratégico de EE.UU. para poder acercarse a Venezuela?
R: No. Yo insisto en que el proceso tiene que ser de la mano. Yo creo que el presidente Petro, hasta donde sé, no es que sea muy apegado a obedecer cosas, como otros presidentes en Colombia, que aceptan la influencia y casi que el mandato de los presidentes de Estados Unidos.
P: ¿Su gobierno considera estratégico apoyar el esfuerzo de Noruega y el gobierno mexicano para la reactivación del diálogo entre la oposición y el chavismo?
R: No me quiero meter en esos temas, hasta que las dos partes acepten y nos pidan estar ahí, obviamente ayudaremos.
P: ¿El gobierno de Petro abrirá una investigación sobre la administración de Monómeros? ¿Existen pruebas de irregularidades en el manejo por parte de la directiva designada por Juan Guaidó?
R: Si, hemos encontrado irregularidades con funcionarios altos de Colombia. Se la robaron por dentro, no solo al dueño en Venezuela. Lo que ha decidido el gobierno de Petro es reconocer al gobierno de Maduro y devolver lo más rápido que se pueda a Monómeros. Se ha hecho con mi trabajo, he estado pendiente de levantar las intervenciones, de la Cámara de Comercio, de la junta y de revisar las actas que van a presentar. Quien ha venido trabajando la vuelta de Monómeros he sido yo.
“Queremos devolver rápido Monómeros con el fin de que nos hagan unos buenos descuentos también en los insumos para la agricultura, para que nos salga más económico”.
Armando Benedetti, embajador de Colombia en Venezuela.
Hay muchas irregularidades, la familia de Guaidó estaba allí, crearon 26 gerencias en 25.000 millones de pesos. Es tan fuerte la empresa, que sin ningún préstamo bancario, aún se mantiene. ¿Qué pasaba con Monómeros? Traían la materia prima y vendían el fertilizante, pero luego querían vender el fertilizante ya hecho y usaron esto como cascarón para que una empresa de los Estados Unidos vendiera el fertilizante en el país. Existen evidencias. Pero de lo que tienen que tener seguridad es que Monómeros va a ser devuelta a Venezuela.
P: Usted dijo que está sobre la mesa la intención de compra de Monómeros por Colombia. Se habla también de una posible quiebra de la empresa. ¿No sería entonces un riesgo para Colombia asumir esta adquisición?
R: Es que la seguridad alimentaria del país vive de los fertilizantes. Queremos devolver rápido Monómeros con el fin de que nos hagan unos buenos descuentos también en los insumos para la agricultura, para que nos salga más económico. Todo el maíz llega de Canadá, pero decimos que si se bajan los precios en Colombia, que aunque siga siendo caro, al menos genera 400.000 empleos. Eso es parte de las políticas públicas. Para nosotros, por eso es muy importante que no apliquen la OFAC (o la llamada Lista Clinton) a Monómeros, porque ya les he explicado a los estadounidenses que es una empresa venezolana, que tiene asiento en Colombia. Ya van tres días hábiles desde que se aprobó la junta, la ley dice que da diez días hábiles para que se interponga el recurso.
P: ONG venezolanas han denunciado la presencia de grupos irregulares colombianos en Venezuela. En los últimos meses, se han dado algunas bajas confirmadas. Petro, por su parte, propuso un cese al fuego multilateral. ¿Cree que ese proceso va a tener también como protagonistas a los disidentes que están en Venezuela?
R: Yo creería que no porque quedó claro que una vez se acogieran al proceso de paz si volvían a delinquir, salían del proceso de paz y eso fue lo que pasó, a pesar de que se sabe que fue un entrampamiento.
P: Ante una eventual reanudación del proceso de paz, ¿se contemplaría incluir al gobierno de Maduro?
R: Yo diría que puede ser el garante de eso.
P: ¿El gobierno de Petro retirará la solicitud de investigación al gobierno de Maduro que impulsó Duque ante la Corte Penal Internacional?
R: Yo te diría que sí. Lo que hizo Duque fue un craso error en las relaciones exteriores.
P: ¿Reconocer que existen perseguidos políticos venezolanos en Colombia, a quienes se les garantizará el asilo político, de alguna manera es reconocer que en Venezuela no existen garantías democráticas?
R: Se les va a respetar su asilo político porque eso es una legislación internacional. Cualquiera que pida asilo será respetado. Recuerda el caso de Alan García, por ejemplo.
P: De las reuniones que sostuvo hoy con la cúpula del chavismo, ¿qué pudo rescatar?
R: La verdad estoy sorprendido gratamente cómo nos han recibido con cariño, con expectativas. He querido armar un lenguaje de optimismo, alegría… desmadurizar la conversación. No puede ser que dos países hermanos se separen. Ese es el lenguaje que creo hay que buscar.
