Caracas — Una propuesta de pronta reapertura de la frontera colombo-venezolana, que no superara los próximos cuatro meses, fue rechazada por Nicolás Maduro, en una primera conversación sostenida con el nuevo embajador de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti, quien confirmó a Bloomberg Línea parte del plan presentado.
Benedetti, que recién salió de Caracas tras una primera visita relámpago, como parte del restablecimiento de las relaciones bilaterales, aprovechó la oportunidad para abordar el tema fronterizo en el Palacio de Miraflores, donde fue recibido por el mandatario venezolano y su esposa, Cilia Flores.
“Yo le propuse al presidente Maduro que por favor lo hiciéramos lo más rápido, que yo proponía levantar en tres o cuatro meses la frontera, me dijo que no. Le dije: ¿Qué te preocupa? Me dijo que el tema del narcotráfico, la inseguridad”, comentó Benedetti, en entrevista a BBL la tarde del martes, a pocas horas de varios encuentros con la cúpula chavista.
La llegada del diplomático, según lo expresado, se da con la intención de promover confianza entre los gobiernos de ambas naciones, cuyas relaciones se habían roto en 2019, con el reconocimiento del antiguo presidente colombiano, Iván Duque, a Juan Guaidó, a cargo del gobierno interino en Venezuela.
“Creo que hace falta que se pongan de acuerdo los cancilleres y que se den tranquilidad entre los gobiernos. Cada uno tendrá sus prevenciones muy altas, por toda la historia que pasó, que casi llegamos a entrar en guerra”, agregó el funcionario colombiano, exsenador y exjefe de campaña de Gustavo Petro, juramentado presidente de Colombia a principios de agosto.
El plan de reabrir por completo la frontera entre Colombia y Venezuela, y con ella la reactivación comercial, seguirá siendo impulsado por Benedetti, quien se mantendrá en traslados continuos entre las capitales mientras se reacondiciona la sede diplomática.
Insistió en la necesidad de crear una zona económica fronteriza, que contemple excepciones de impuestos, sobre todo para los colombianos, así como una legislación para la inversión en obras venezolanas, que impacten en la reconexión de la zona.
Un mecanismo que dé garantías legales e institucionales a las empresas colombianas, también está siendo evaluado. Colombia, tal y como lo expresó el embajador, es la más interesada en la reapertura, luego de un cierre que le restó ganancias comerciales por más de 5.000 millones de dólares.
“Si abrimos la frontera, le restamos a las mafias, a la explotación sexual, al paso ilegal por las trochas, al narcotráfico”, destacó igualmente Benedetti, en conversación con BBL, desde Caracas.
Las expectativas en torno a una pronta reapertura son elevadas, precisamente luego de un encuentro binacional entre empresarios y dirigentes políticos de ambos países, con un acuerdo de frontera, que establece como prioridad el trabajo conjunto y la proyección gradual en términos del logro de objetivos sectoriales.
