Más allá de agendar citas vía WhatsApp para cortarse el pelo o recibir un masaje, la digitalización está llegando a los pequeños negocios relacionados con el bienestar y la belleza. En México, Scape es la primera app de masajes y faciales a domicilio y en Chile nació AgendaPro, que se autodenomina el Shopify de estas pymes.
Estas dos startups ya están establecidas desde hace tiempo en el mercado y van creciendo de manera importante en países como México y Chile, donde los ecosistemas de emprendimiento están desarrollados.
Pero también en los mercados más pequeños, como Puerto Rico, Carmen Medina y Afa Juste fundaron la startup de belleza on-demand para mujeres, Beauty 911. Recientemente, la startup puertorriqueña cerró una ronda pre-semilla de US$200.000 dólares del fondo 305 Ventures con sede en Miami.
Desde 2019 comenzó la tendencia de digitalización de todos los negocios, la cual se exponenció a partir del 2020 con la llegada de la pandemia y la necesidad de volcarse a internet para salir adelante.
AgendaPro, de software para ser más eficiente a fintech
AgendaPro ofrece procesamiento de reservas y pagos para empresas independientes en la industria de la belleza y el bienestar. En enero de 2022, la startup chilena que cuenta con el respaldo de Y Combinator, recibió una ronda de financiación de US$3,7 millones liderada por Kayyak Ventures y con participación de FEN Ventures, TMT Investimentos, Y Combinator, James Park (CEO de Fitbit), SCM Advisors y Cathexis Ventures.
La empresa fundada en 2014 por Julio Guzmán, Matías Ulloa, Sebastián Hevia y Nicolás Rossi ya tiene operaciones fuera de Chile en México, Perú, Colombia y Argentina.
Julio Guzmán, CEO de AgendaPro, dijo a Bloomberg Línea que desde que recibieron capital se han enfocado en “crear un súper equipo de tecnología; somos una empresa de tecnología, somos un software y nuestros usuarios, o sea los dueños de las estéticas, de las barberías, de los salones, nos usan en promedio 8 horas al día”.
Así pasaron de 8 desarrolladores a ser más de 50 personas en el equipo de producto y tecnología, en el cual hay más de 40 desarrolladores de tecnologías y programadores, compartió Guzmán.
Guzmán asegura que su principal logro es la satisfacción de sus usuarios. “Muchos clientes nos empezaron a referir, empezamos a crecer y a captar más clientes solamente por el boca a boca”, enfatizó el emprendedor que ha llegado a México con el objetivo de hacer crecer su negocio.
Y parte de este crecimiento es la expansión hacia otra línea de negocio: su brazo fintech. “Ahora que ya demostramos que AgendaPro es un muy buen aliado tecnológico. Ahora vamos a hacer un agente, vamos a migrar a solucionar los temas de pagos, de tasas justas, de que puedan acceder a crédito”, adelantó Guzmán.
La solución surgió porque “usualmente una barbería, un spa o una estética cuando quiere expandirse porque le está yendo bien o cuando quiere tomar una nueva iniciativa para remodelar su local usualmente no puede por las restricciones de capital porque no pueden acceder a financiamiento”, lamentó el emprendedor. Y agregó que especialmente las mujeres, que son dueñas del 80% de estos negocios, tienen problemas para acceder a créditos.
Para hacer esto posible, sumaron al equipo de AgendaPro a Pablo Marambio, con más de una década de experiencia realizando productos financieros. Desde abril AgendaPro tiene una terminal de pagos y ofrece tasas más bajas que los bancos. Y ese primer mes de implementación la startup creció un 42%.
La conexión de la terminal de pagos con el software de AgendaPro, lo que permite eficientar también las finanzas de los negocios.
Scape una app que lleva el spa a casa
Scape es una app mexicana de masajes y faciales a domicilio. Fundada por Helle Jeppson, y el arquitecto José de Murga en 2018, pero cuyo crecimiento fue exponencial a raíz de las restricciones sociales derivadas de la pandemia, donde la demanda de las consumidoras para concertar citas en línea a domicilio incrementó.
Jeppson que es CEO de Scape dijo a Bloomberg Línea que todo comenzó con la apertura de tres spas físicos. Sin embargo, había un problema. “Teníamos llenos los fines de semana, pero entre semana no lográbamos llenar la capacidad, pero teníamos toda la estructura de cosas y pensamos cómo lograr trasladarlas del spa a la casa de la gente”.
Entonces desarrollaron la app, para poder emplear a sus propias terapeutas y masajistas, cuyo desarrollo técnico ahora está liderado por una mujer en TI, Aurora Rodríguez, quien es la CTO de Scape.
Sin embargo, aunque la pandemia fue un detonante de digitalización de los negocios, fue un momento complicado para las industrias que necesitan el contacto físico, como los spa, entonces tuvieron al principio una dificultad en la demanda. Así que por un periodo de tiempo, comenzaron a vender productos para obtener ingresos.
Poco a poco comenzaron a crecer con recursos financieros propios, compartió Jeppson, hasta lograr expandir los servicios de masaje de Scape más allá de la Ciudad de México a otras ciudades como Querétaro, Puebla, Mérida, San Miguel hasta alcanzar 23 ciudades en México.
Al momento tienen 60.000 usuarios registrados en la app de Scape y han tenido crecimientos importantes. De marzo a abril, el incremento fue de 40% y mes a mes el crecimiento ha ido en alrededor de 25%.
Además de los servicios individuales, Scape ha incursionado también en un modelo B2B. En este ofrecen una membresía mensual para las empresas, cuya demanda está a la alza debido al requerimiento de la NOM 35, que obliga a las empresas a cuidar del bienestar de sus empleados.
Actualmente trabajan con alrededor de 140 corporativos, entre los que se encuentran Nubank, Runa, Facebook, Google, Huawei y Tous.
Hoy el equipo de Scape es de más de 800 terapeutas, el 90% son mujeres, entre las que destacan terapeutas con discapacidad.
Para Jeppson la capacitación de las terapeutas es sumamente importante por lo que da cursos online para que sigan aprendiendo nuevas técnicas de masaje, por ejemplo. La idea ha funcionado a tal grado que tiene como objetivo para 2023 lanzar una academia digital de capacitación para terapeutas y cosmetólogas.
