Mexicana Auronix recibe $290 millones de pesos de Alloy Capital

La empresa mexicana de comercio conversacional recibió esta inyección de capital como préstamo estructurado. El objetivo es lograr el crecimiento sostenido y rentabilidad.

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La empresa mexicana de comercio conversacional, Auronix, recibió una inyección de capital de $290 millones de pesos como préstamo estructurado de Alloy Capital, una compañía de inversión transfronteriza que se vio atraída por el negocio del comercio conversacional. La inversión se da en un contexto de cautela en las inversiones de capital privado.

La inversión será utilizada para la expansión, crecimiento sostenido y rentabilidad de Auronix, que crea experiencias conversacionales mediante canales de mensajería instantánea como WhatsApp, Messenger, Instagram, Google Business Messages, Apple Messages for Business, RCS y SMS.

“La experiencia de Alloy Capital en todas las industrias, el soporte estratégico cercano y la red comercial extendida con la que cuentan, nos ayudarán a acelerar el crecimiento”, comentó Adrián Villaseñor, Co-CEO de Auronix, en un comunicado.

Auronix, fundada en 1994, ha trabajado con empresas de diversos sectores, como retail, telecomunicaciones, logística y banca.

“La pandemia llegó para revolucionar los métodos de operar para volverlos cada vez más digitales, lo cual afecta en la forma en que las empresas adquieren, retienen e impulsan el crecimiento de los ingresos”, declaró Jaime Arreola, director general de finanzas estructuradas de Alloy Capital Finance sobre la oportunidad de negocio de Auronix, una empresa que, asegura, han seguido desde hace varios años.

Hoy en día, el 91% de los consumidores quieren utilizar la mensajería como canal para interactuar con las empresas. Para las empresas el comercio conversacional ayuda a simplificar la experiencia de compra.

La empresa mexicana asegura que sus soluciones automatizadas permiten mejorar el servicio al cliente, reducir costos e incrementar sus ventas digitales hasta en un 75%, además de ahorros de hasta 85% en los costos operativos en materia de comunicación, comparado con métodos tradicionales como las llamadas telefónicas.