Bogotá — En el Congreso de la República ya inició su tránsito la tributaria del nuevo gobierno, un día después de la posesión de Gustavo Petro como presidente, el 8 de agosto. Con mensaje de urgencia los tiempos del trámite se reducen y se le da prioridad ens el orden del día para aprobarla lo antes posible y obtener nuevos recursos pronto.
Síguenos en las redes sociales de Bloomberg Línea Colombia: Twitter, Facebook e Instagram
Aunque tiene el plus del mensaje de urgencia, la tributaria tiene varios retos previo a ver la luz verde, entre ellos llegar a acuerdo con las distintas bancadas e intentar que no se afecte mucho el recaudo estimado en medio de cada negociación. Con una meta de $25 billones de recaudo, expertos aseguran que esa cifra es demasiada optimista y se lograría mucho menos.
La gran pregunta que surge con lo anterior es si de lograrse dicho recaudo estimado, e incluso menos, el país se vería inmerso en la necesidad de discutir más de una tributaria durante el gobierno de Gustavo Petro para avanzar en la sostenibilidad de las finanzas públicas y para cumplir las metas fiscales de los próximos años.
Aunque varios expertos consultados por Bloomberg Línea dicen que dependerá de que se defina cuál será el uso de los recursos, otros adelantan que lo más probable es que sí se necesiten más tributarias.
¿Qué dicen los expertos?
En palabras de Germán Machado, docente de economía de la Universidad de los Andes, “incluso con un recaudo de $25 billones, el país seguirá necesitando nuevas reformas tributarias en el futuro. El déficit estructural del país no queda resuelto ni siquiera en ese escenario. Como una parte del nuevo recaudo se destinará a nuevos programas de gasto, sólo una fracción mejorará el déficit fiscal y reducirá la deuda. Seguirá siendo necesario tramitar nuevas reformas en años por venir, aunque ojalá con menos frecuencia”.
Para contextualizar lo anterior, cabe recordar que en Colombia en promedio cada dos años se tramita una nueva reforma tributaria y estas no recaudan más de $10 billones.
Sin embargo desde la visión de Gabriel Angarita, experto en temas tributarios, durante el mandato de Petro no necesariamente se necesitará otra reforma. Respecto a la que se radicó recientemente dijo que “aún no es del todo clara en cuál será el uso de los recursos, en principio todos los recursos se utilizarían para aumentar las transferencias monetarias y la inversión. En caso de un menor recaudo se tendría que ajustar el gasto”.
“Yo no creo que se requieran más tributarias para avanzar en la sostenibilidad de las finanzas públicas, lo que sí es posible es que las metas optimistas del Marco Fiscal de Mediano Plazo (MFMP) de deuda y déficit previstas para el 2023 se cumplan hasta un año más tarde, pues tal como quedó en el marco, en 2023 se lograría un déficit de 3,6% y una deuda de 56,2% gracias a una disminución muy importante de la inversión pública, algo que este Gobierno no piensa hacer y piensa llenar ese hueco con los recursos de la reforma tributaria”, dijo María Fernanda Valdés, coordinadora para la Friedrich Ebert Stiftung en Colombia y miembro del equipo de empalme de Gustavo Petro.
Vale mencionar que, según el Marco Fiscal de Mediano Plazo, Colombia tendría una deuda neta del Gobierno Nacional Central de 56,5% del PIB y un déficit fiscal de -5,6% en 2022, mientras que para fin del mandato Petro, en 2026, las cifras serían 54,2% y -3,3%, respectivamente.
Dichas cifras seguirían estando muy altas si se tiene en cuenta que antes de la pandemia los indicadores de deuda y déficit eran 48,4% del PIB y -2,5%, cada uno. Por esto es que los expertos están atentos de mayor claridad por parte del actual Gobierno sobre qué tanto del recaudo de la nueva tributaria iría al ajuste fiscal y qué tango a nuevos gastos para saber si el país necesita nuevos recursos permanentes.
Valdés agregó que “lo que sí es posible es que, dependiendo de los resultados de esta tributaria, se requiera una nueva reforma para bajar la carga de las empresas, tal como lo ha dicho el ministro Ocampo en varias oportunidades”.
Para Juan Pablo Espinosa, jefe de investigaciones económicas de Bancolombia, todo dependerá de qué tanto termine recaudando la reforma tributaria radicada en el Congreso y de “cuáles sean los planes de gasto de la nueva administración frente a las cuales todavía no tenemos una definición concreta porque no se ha presentado la revisión al proyecto del Presupuesto General de la Nación de 2023″.
Espinosa alertó que hay que prestarle atención al tratamiento del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), fondo deficitario a través del cual Colombia subsidia el precio de la gasolina y el ACPM. Para el experto “la manera en la que siga evolucionando ese faltante de recursos dependerá en últimas en una propoción importante si se requiere, si serán necesarios o no, los recursos adicionales que se busquen en una próxima tributaria”.
Cabe mencionar que recientemente el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, dijo en el Congreso que “el Gobierno pasado pagó en el primer trimestre de año $6 billones del déficit que existía con el FEPC y nos dejó en el Presupuesto de 2023 $19 billones destinados a cubrir ese déficit, pero se estima que para final de este año será de $37 billones, y para el próximo año las proyecciones indican que será de $28 billones”.