Bloomberg — Analistas que cubren Brasil redujeron sus previsiones de inflación para 2023, terminando de esta manera con una racha de 19 aumentos consecutivos. El cambio llega al tiempo que el banco central del país da señales de mayor confianza respecto a su capacidad de controlar la inflación.
En concreto, los analistas esperan que los precios al consumidor lleguen al 5,33% a finales de 2023, en contraste con el 5,38% anterior, según la más reciente encuesta semanal del banco central.
Además, las proyecciones de inflación para diciembre de este año se redujeron por octava semana seguida: se ubicaron en 6,82%, en comparación con el 7,02% anterior.
La autoridad monetaria del país se encamina a finalizar un ciclo de ajuste en el que sumó 11,75 puntos porcentuales a los costos de endeudamiento desde marzo del año pasado. El presidente del banco central, Roberto Campos Neto, ha dicho que las tendencias de inflación están comenzando a mejorar.
Si bien los responsables de política monetaria señalaron que evaluarían la necesidad de otro aumento de tasas el próximo mes, la mayoría de los analistas creen que la campaña de alzas culminó al llegar al 13,75%.
Los responsables de formular la política están trabajando para controlar el golpe de los precios de alimentos y energía que han mantenido la inflación por encima del 10% durante casi un año. Los recortes de impuestos recientes ayudaron a reducir los costos de la gasolina y el gas para cocinar, pero los precios de algunos productos básicos como la leche siguen al alza
Las estimaciones de inflación aún se mantienen por encima de las metas del banco central hasta 2024. Para este año y el próximo, los pronósticos también superan los límites superiores respectivos del rango de tolerancia de 5% y 4,75%.
Hasta ahora, la economía está demostrando ser resistente a una política monetaria más estricta. El desempleo está cerca de un mínimo de siete años y la demanda se ha visto impulsada por la ayuda social multimillonaria aprobada por el Congreso.
Tanto el presidente, Jair Bolsonaro, como su principal rival, Luiz Inácio Lula da Silva, se han comprometido a extender las transferencias de efectivo a la población más pobre si ganan las elecciones de octubre.
Los analistas de la encuesta del banco central elevaron sus estimaciones de crecimiento económico para este año al 2,02%.
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