Santiago — Las autoridades chilenas están preparándose para presentar acciones legales en contra de la minera Ojos del Salado, propiedad en un 80% de Lundin Mining y un 20% de Sumitomo, por el socavón, de unos 35 metros de diámetro, que apareció a principios de agosto en la mina Alcaparrosa localizada en Tierra Amarilla, región norteña de Atacama.
La investigación sobre las causas del enorme agujero está por ser concluidas, lo que allanaría el camino para levantar los cargos por parte del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), la Superintendencia de Medio Ambiente y la Dirección General de Aguas de Chile.
Ojos del Salado reaccionó inmediatamente al anuncio. La minera precisó en un comunicado que, una vez que sean notificados, analizarán las conclusiones a las que llegarán los organismos técnicos, verán responsabilidades y tomarán las “medidas pertinentes”.
“Sobrexplotación” minera
El Gobierno está abordando la situación desde su aparición. La ministra de Minería, Marcela Hernando, dijo este jueves que las investigaciones apuntan a que existe una “sobrexplotación” por parte de la minera, específicamente en el caserón que se encuentra ubicado bajo la zona del agujero.
“El caserón Gaby 4 estaba diseñado y autorizado para una explotación de 400 mil toneladas y de acuerdo con los datos obtenidos en la investigación, se detectó que se han extraído 300 mil toneladas y dentro del caserón quedan, a lo menos, 300 mil toneladas más”, indicó después de encabezar una reunión interministerial.
No descarta una afectación del acuífero que se encuentra en ese lugar. “Sernageomin ya tiene datos de sobra para visualizar que hubo explotación’ en el territorio afectado”, dijo Hernando.
Grietas en sectores cercanos al socavón
Junto con ello, las autoridades manifestaron su preocupación por tres sectores cercanos al hundimiento, los cuales están presentando grietas en la superficie. Desde este viernes se comenzará a trabajar en estudios de geofísica.
Pero desde la minera aclararon que estas grietas fueron detectadas previamente, como parte de los trabajos de estudios en la zona, y forman parte de un evento independiente al socavón. “No existen faenas mineras subterráneas ni centros poblados cercanos”, enfatizaron.
De momento, el socavón no representa un riesgos para la población de Tierra Amarilla, porque se encuentra a unos 600 metros de la vivienda más cercana. “La mina Alcaparrosa no tiene operaciones activas bajo la zona urbana”, explicaron desde la empresa.
