El cambio de ánimo en el mercado que generó el desembarco de Sergio Massa como ministro de Economía, sumado a la agresiva suba de tasas del Banco Central (BCRA) y a un contexto eterno más benévolo, despertó en algunas tesorerías un nuevo interés por hacer carry trade: es decir, vender dólares y posicionarse en pesos para aprovechar los rendimientos positivos.
Sin embargo, para muchos analistas financieros esta estrategia es sumamente riesgosa, dado que ante una eventual falta de señales positivas por parte del Gobierno el tipo de cambio puede volver a reaccionar y el costo de quedarse en moneda local puede ser demoledor, tanto para empresas como para inversores individuales.
“La irrupción de Massa coincide con un mejor clima global, y además él apuntó a los objetivos correctos para despertar cierta expectativa entre los inversores. La fuerte suba de la tasa de interés (el Banco Central llevó la TEA de las Leliq por arriba del 96%) hizo el resto, comenzando cierto carry trade”, sintetizó un informe de Delphos Investment.
No obstante, el documento se refiere al cortoplacismo de esta estrategia al destacar: “Los operadores definen a este movimiento como un trade semanal, mostrando la escasa visibilidad futura y los enormes riesgos de la desafiante coyuntura global”.
Actualmente, el dólar MEP se mueve apenas arriba de los $280 y los contado con liqui (CCL) en torno a los $285, luego de haber alcanzado estos últimos picos de $340. Es decir, si las perspectivas se vuelven a tornar negativas, el riesgo de sufrir fuertes pérdidas por parte de quienes opten por pasarse a pesos y aprovechar tasas puede ser muy alto.
Una estrategia peligrosa
El mismo informe de Delphos Investment aclara que para que el carry se extienda en el tiempo, el Gobierno necesita que el BCRA empiece a acumular reservas. De hecho, la consultora advierte a quienes optan por el carry trade que “el equilibrio actual luce como muy inestable, negándose por ahora el Gobierno a ejecutar un ajuste clásico que incluya la devaluación de la moneda” y observa que “el tiempo para conseguir dólares genuinos se agota con cada movimiento adverso de las variables globales”.
Por su parte, Gustavo Ber, del Estudio Ber, aseguró: “La fuerte suba en la tasa de interés está permitiendo extender la relativa calma entre los dólares financieros y mientras se monitorea la marcha del escenario económico, algunos operadores se ven tentados por tácticas de carry-trade, aún reconociendo los riesgos asociados y el minucioso timing que es requerido”.
Precisamente, entrar el carry trade requiere la gimnasia necesaria para saber cuándo salir. “Para cada caso en particular hay que identificar los riesgos que se corren si optás por el carry”, consignó Andrés Reschini, de F2 Soluciones Financieras respecto de las decisiones que pueden llegar a tomar las tesorerías de las empresas en este contexto.
“Por ejemplo, en algún caso las compañías se pueden ver tentadas por la tasa en pesos, pero después, cuando necesiten usar esos fondos para lo operativo, hay que ver si en el medio no les agarró un salto en el tipo de cambio o un salto inflacionario que los deja perdiendo con lo que necesiten comprar”, advirtió Reschini y consideró que en el momento actual él priorizaría “asegurar la salud financiera de la empresa”, aunque aclaró: “Cada compañía decide qué riesgo correr. Lo importante es saber identificarlos”.
Asimismo, Ornela Di Doménica, asesora financiera de TSA Bursátil, sostuvo que, en un contexto como el actual, “es aconsejable que cualquier empresa que esté expuesta a riesgo cambiario se cubra” y que “la alternativa adecuada dependerá de cada inversor”.
Cobertura cambiaria
Aquellas empresas o personas que optan por cubrirse de un salto cambiario tienen un menú de opciones, dependiendo de sus posibilidades y de si prefieren resguardarse de lo que suceda con el oficial o con los paralelos. Por otra parte, también influyen las normativas vigentes, dado que muchas empresa preferían posicionarse en Certificados de Depósito Argentino (Cedear) como forma de seguir al dólar CCL. Sin embargo, el Banco Central impuso un límite de US$100.000 en Cedear a aquellas empresas que quieran acceder al dólar mayorista.
Tomás Ruiz Palacios, estratega de Consultatio, indicó que las empresas que buscan cubrirse de un salto quedaron atrapadas en una elección entre “lo menos malo”. En ese sentido, destacó: “La mejor alternativa serían los Cedear, ya que vemos al contado con liqui (CCL) muy cerca de los $400 para fin de año, mientras que el tipo de cambio implícito que nos da invertir en carry trade o en la curva CER nos arroja que terminarías con un contado con liqui de $350″. Es decir, según esta óptica, posicionarse en dólar CCL (vía Cedear, por ejemplo) sería la opción más conveniente, aunque allí entran a jugar los limitantes para empresas.
Dado que esta opción muchas compañías no la tienen, Ruiz Palacios ponderó a los bonos CER, que indexan por inflación, por encima de los bonos dólar linked. “Entre bonos dólar linked y bonos CER creemos que es mejor esto último para cubrirse de un salto discreto del tipo de cambio oficial. Cuando hay mucha inercia inflacionaria los traspasos a precios de las devaluaciones suelen ser bastante elevados, además de que los dólar linked tienen el problema de que después de un salto cambiario pierden valor”, explicó.
Por último, el ejecutivo de Consultatio añadió: “Para los que se animen, el sintético que se obtiene vendiendo contratos de Rofex noviembre y comprando el bono dólar linked a noviembre ofrece la mejor tasa de mercado y es una excelente alternativa para empresas. Pero solo para colocar un poco de la cartera, porque no deja de ser un instrumento complejo con ciertos riesgos”.
Por su parte, Ornela Di Doménica mencionó que la cobertura mediante dólar futuro otorga como principal ventaja la posibilidad apalancar la posición, ya que para comprar un contrato de dólar (equivalente a US$1.000) se necesita aproximadamente el 20% de dicha posición para entregar en garantía. “Si bien hoy las tasas implícitas están cercanas al 110%, de acompañar el capital invertido a tasas promedio del 60% anual y considerando una devaluación proyectada del 70% anual, el resultado de la cobertura siempre será positivo”, expresó.
Estrategias dólar linked más utilizadas por empresas
En cuanto a la cobertura específica en instrumentos que ajustan por la evolución del dólar oficial, Lucas Confalonieri, managing director de Adcap Grupo Financiero, resumió: “Dado el contexto de aumento del crawling peg, que se encuentra actualmente en torno al 6% mensual, las gerencias financieras de las empresas están aplicando básicamente tres estrategias de cobertura cambiaria, de acuerdo al nivel de liquidez y al plazo que necesitan cubrir. Por un lado, suscriben el dinero a fondos comunes de inversión (FCI’s) dólar linked, invierten en bonos soberanos o corporativos dólar linked y se posicionan también en pagarés bursátiles dólar linked, cuyos plazos van de los 6 a los 24 meses”.
Confalonieri afirmó además: “Esto se puede ver en números. En el año, los FCIs dólar linked tuvieron suscripciones netas por aproximadamente 80.000 millones de pesos y representan el 8,6% de la industria”.
El ejecutivo de Adcap Grupo Financiero explicó que, por otro lado, “cuando las empresas se cubren del riesgo devaluatorio mediante la compra de bonos corporativos dólar linked tienen que tener en cuenta que lo hacen en un mercado sin profundidad y que resulta en precios más elevados”.
Cobertura vía ON
Ornela Di Doménica coincidió con Confalonieri en que el principal problema de las obligaciones negociables dólar linked tienen como principal inconveniente su falta de liquidez en el mercado secundario.
Y en relación a las ON hard dólar aclaró: “Hay que tener en cuenta la restricción de compra de ON ley extranjera para aquellas empresas que acceden al mercado de cambios, al igual que sucede con la tenencia de CEDEARs. De todas maneras, hay que mencionar que estos activos siguen al Dólar MEP, por lo que aquellas empresas que necesiten mitigar el riesgo de devaluación oficial estarían convalidando un un tipo de cambio 100% mayor”.
Estabilidad del CCL y el MEP en el corto plazo
Adrián Yarde Buller, economista jefe y estratega de Facimex Valores, estimó que “en el corto plazo podría extenderse la estabilidad del tipo de cambio implícito en los activos financieros”, ya que la valuación del mismo “volvió a estar alineada con las variables nominales de la economía, el contexto global está mejorando en el margen y la semana pasada el Banco Central profundizó el endurecimiento monetario”.
“Todas estas son condiciones que juegan a favor de que se extienda la estabilidad del tipo de cambio implícito en el corto plazo”, resumió.