Bloomberg — Las acciones estadounidenses borraron pérdidas anteriores en una sesión agitada, en la que las empresas de megacapitalización se vieron recompensadas por la debilidad de los datos del sector manufacturero neoyorquino y de la economía china. Los bonos del Tesoro suben, lo mismo que el dólar, mientras que las materias primas, desde el petróleo hasta el mineral de hierro, caen.
El S&P 500 cotiza con pocos cambios, mientras que el Nasdaq 100, donde las tecnológicas tienen un gran peso, sube gracias a las ganancias de valores como Tesla Inc. (TSLA) y Apple Inc (AAPL).
Los rendimientos del Tesoro bajan y la curva de los bonos sigue profundamente invertida, lo que apunta a la preocupación de que la campaña de endurecimiento monetario de la Reserva Federal contra la alta inflación provoque una recesión en EE.UU.
A lo largo de las últimas semanas, los mercados de valores se han visto favorecidos por las señales de desaceleración de la inflación, lo que ha despertado la esperanza de que la Fed se incline por subidas de tasas menos agresivas y una desaceleración gradual de la economía.
Sin embargo, un indicador de la actividad manufacturera del estado de Nueva York sufrió la segunda mayor caída en los datos que se remontan a 2001, con fuertes descensos en pedidos y envíos que indican una abrupta caída de la demanda, según un informe publicado el lunes.
Mientras tanto, la vacilante economía china muestra que aún quedan muchos obstáculos por delante para que las acciones mundiales se recuperen desde los mínimos del mercado bajista de junio. Y en la zona euro, el riesgo de recesión ha alcanzado el nivel más alto desde noviembre de 2020, según los economistas encuestados por Bloomberg.
El petróleo se desploma más de un 5%, mientras que el mineral de hierro, el cobre y otros metales caen ante la creciente preocupación de que la lenta recuperación de China frene la demanda de materias primas. El oro retrocede por debajo de los US$1.800 dólares la onza y el bitcoin (XBT) oscila alrededor de los US$24.000.
Los datos mostraron que las ventas minoristas, la inversión y la producción industrial de China en julio no cumplieron las estimaciones de los economistas. El banco central había recortado anteriormente los costos de endeudamiento.
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