Bloomberg — El enorme incendio en el depósito de combustibles de Matanzas ha provocado que Cuba se viera obligada a desactivar el lunes una de la más grandes centrales de electricidad de la isla lo que provocará que se agrave la crisis de energía en la isla caribeña.
La central termoeléctrica Antonio Guiteras de 200 megavatios (MW) fue desconectada de la red por falta de agua, indicó el Ministerio de Energía y Minas de la isla. El portavoz del gobierno, el Partido Comunista de Cuba, señaló que el incendio había interferido con el suministro de agua a la planta.
A causa del nuevo corte de energía, la isla solo podrá cubrir este lunes algo más de la mitad de la demanda máxima de energía de 3.000 MW, informó el Sindicato de Trabajadores Eléctricos. En sus cuentas de redes sociales, informaron que, en total, unos 1.223 MW de generación están fuera de servicio.
Una nueva explosión en un tercer tanque ubicado en el norte de la isla caribeña se produjo el lunes por la mañana, mientras se intentaba contener el incendio, que ya lleva tres días.
“El tercer tanque también ha colapsado, luego de que el segundo tanque derramara combustible y complicara aún más la situación”, escribió la Presidencia en Twitter.
Dos tanques de almacenamiento, uno con 26.000 metros cúbicos de petróleo y otro con unos 50.000 metros cúbicos de fuel oil, se incendiaron el viernes por la noche después de que un rayo cayera sobre el complejo.
Bomberos venezolanos, mexicanos y cubanos han estado tratando de contener el incendio mientras las autoridades dicen que han logrado desviar al menos 520 metros cúbicos de combustible. No estaba claro de inmediato cuánto o qué tipo de combustible contenía el tercer tanque.
Las múltiples explosiones han dejado al menos 125 heridos, un muerto y más de una decena de desaparecidos, según medios estatales. El lunes, el gobierno aconsejó a los residentes del área que permanecieran en sus casas y usaran mascarillas mientras columnas de humo negro oscurecían el cielo.
El complejo de Matanzas, en la costa norte de Cuba, a unas 56 millas al este de La Habana, recibe importaciones de fuel oil, principalmente de Venezuela y Europa, que se distribuyen a las centrales eléctricas.
Sherritt International Corp. (S), uno de los mayores inversores extranjeros en Cuba, dijo que sus activos de energía cerca de Matanzas no se han visto afectados por el incendio. La minera canadiense, que planea expandir su operación principal de níquel y cobalto en el extremo este de la isla, está brindando apoyo donde puede, dijo un portavoz.
Incluso antes del incendio, Cuba luchaba por mantener las luces encendidas en medio de averías y escasez de combustible. Los apagones continuos han provocado protestas.
El incendio se produce cuando la inflación anual de Cuba alcanzó el 29% en junio, en gran parte impulsada por el debilitamiento del peso y el aumento de los costos del combustible y las importaciones. La economía de Cuba creció un 1,3% en 2021 después de dos años de caídas récord.
Con la asistencia de Lucía Kassai y Stephen Wicary.
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