Benos Aires — Sergio Massa deberá afrontar varios desafíos en su llegada al gabinete del Gobierno argentino, y uno de los más urgentes será el de generar un marco que ayude al Banco Central (BCRA) a recomponer sus magras reservas internacionales, que en términos netos cada vez se acercan en forma más peligrosa a terreno negativo.
Si bien este año los precios de los productos que exporta Argentina alcanzaron niveles récord, la brecha entre el dólar Contado con Liquidación (hoy en torno a los US$280) y el dólar oficial (en $132,41) ha desalentado las exportaciones e incentivó las importaciones.
En lo que va del año el Banco Central apenas pudo comprar en el Mercado Único y Libre de Cambios US$271 millones, mientras que al 2 de agosto de 2021 había adquirido US$7.171 millones. No obstante, y pese al mencionado desaliento a vender, las liquidaciones del campo se encuentran en 2022 en niveles récord. Pero pareciera no alcanzar.
En este contexto, las reservas netas del BCRA se encentraban en apenas US$2.260 millones al 25, según las estimaciones de Aurum Valores. Ahora bien, esa cifra pasa a ser negativa si se resta el oro –unos US$3.588 millones– y más aún si se resta la cuenta del Tesoro en divisas. Además, desde ese día continuó el drenaje.
Reservas que caen
Un informe publicado por la consultora LCG el 29 de julio detalla: “Las reservas netas se ubicarían en US$1.750 millones, y contra diciembre acumulan una baja de US$570 millones, lo que contrasta con la meta acordada con el Fondo Monetario Internacional (FMI) de sumar US$4.400 millones hacia fin del tercer trimestre”.
Por su parte, desde el broker Facimex Valores consignaron este 3 de agosto: “A pesar de la aceleración de la tasa de devaluación, reportes de traders sugieren que el BCRA habría vendido US$280 millones en el comienzo de agosto y US$660 millones en las últimas cinco ruedas, llevando a las reservas netas a ubicarse en torno a los US$2.000 millones según la definición de reservas netas del FMI. El margen de maniobra es acotado con pocas reservas, y por eso los futuros asignan una elevada probabilidad a devaluación mayor, con tasas de triple dígito para todos los contratos a excepción de agosto”.
En el mercado suena fuerte la versión de que el nuevo equipo económico busca conseguir financiamiento externo a través de un repo, lo que sugiere que la apuesta de Massa sería fortalecer las reservas del BCRA para ganar poder de fuego y evitar una devaluación.
Los dólares de la soja
El 26 de julio, días antes de que se anuncie el desembarco de Massa, el Banco Central anunció una medida que busca que durante agosto el campo acelere su liquidación. La autoridad monetaria permite que entre el 1° y el 31 de agosto los productores de soja puedan comprar dólar ahorro por el equivalente al 30% de sus ventas y utilizarlo para formación de activos externos.
Si bien el mercado y las entidades ruralistas desconfían que esta medida tenga éxito, el presidente del BCRA, Miguel Ángel Pesce confía en que permita acelerar la venta de entre US$2.500 y US$2.800 millones en soja.
Así lo confirmó, días atrás, en una entrevista radial concedida al periodista Roberto Navarro el titular de la entidad. “La demora en la cadencia de liquidación del sector es de US$2.500 a US$2.800 millones. Y alrededor de US$2.200 millones que tienen las cerealeras pero aún no le han pagado al productor. Según el Ministerio de Agricultura hay US$13.000 millones en porotos. Dentro de ese espacio está lo que se puede llegar a obtener”, afirmó Pesce.
No obstante, Bloomberg Línea le preguntó a cinco macroeconomistas, y ninguno consideró que pueda llegar a tener tal éxito la medida.
El economista Andrés Reschini, de la consultora F2 Soluciones Financieras, estimó que el dólar implícito que le quedaría al productor que liquide sus granos bajo este régimen es, a precios actuales, de $206,28 (restando las retenciones).
El productor obtiene una mejora 16,7% respecto de si no existiese este tipo de cambio y fuese a comprar al MEP. No obstante, aclara Reschini, este cálculo no tiene en cuenta el adelanto por ganancias, por lo que el número final termina siendo menor.
“Hay que resaltar que lo que el productor deje en plazo fijo dólar link queda en pesos y corre riesgo de brecha, además de lo engorrosa que es la operación”, resumió.
De hecho, la liquidación de granos en lo que va del año ha sido muy buena. Según la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) el agro ingresó US$22.309 millones entre el 1° de enero y el 31 de julio, es decir, un 10% por encima del último año. Y es el récord histórico desde que existen registros.
Sin embargo, pocas veces ha habido una brecha tan grande entre lo que el campo liquida y lo que el Gobierno logra comprar. He ahí el principal problema que deberán resolver las autoridades económicas del país.
