Bloomberg Línea — La penetración del internet y la llegada de la pandemia del Covid-19 aceleraron la digitalización de los productos bancarios en Colombia, según demostraron las recientes mediciones de la Superintendencia Financiera y la Banca de Oportunidades, en su Encuesta de Demanda de Inclusión Financiera 2022.
Hasta el año anterior, según la información disponible, un 90,5% de los adultos en el país contaba por lo menos con un producto financiero, un aumento del 5,5% frente a la última medición, abarcando a un total de 33,5 millones de adultos.
Pero aún con estos avances y la ampliación de la cobertura de internet, que han llevado a que más personas tengan billeteras virtuales y realicen transferencias electrónicas, la encuesta demostró que la preferencia de los colombianos por el dinero en efectivo sigue siendo alta.
Los resultados indican que como medio de pago el efectivo sigue siendo el más usado en el país, con una preferencia del 62,2% para los gastos diarios, de acuerdo con la población encuestada, frente a un 18,1% que paga con tarjetas débito y otro 15,2% por transacciones electrónicas.
“La incursión de la tecnología le dio una nueva dinámica a las transacciones que día a día realizan los emprendimientos y el comercio electrónico dada la seguridad y eficiencia que representan los canales digitales para el consumidor financiero”, dijo el superintendente Financiero, Jorge Castaño.
En cuanto a las alternativas para hacer depósitos y pagos, la encuesta indicó que el 47,9% de los adultos tiene una cuenta de ahorros y, en una proporción igual, un monedero digital. El 37% hace uso de la tarjeta débito y el 9,2% de la cuenta corriente.
“Las principales razones para elegir estas opciones están jalonadas por la facilidad y seguridad que estas ofrecen para realizar diferentes tipos de transacciones”, señalaron las entidades.
Además, los cajeros automáticos son los canales financieros más usados en el país (33,6%), seguidos por los corresponsales bancarios (33%) y los medios digitales (internet o telefonía móvil [24,5%]). “Solo el 9% de los encuestados reportó que las oficinas físicas son la opción que más frecuentan para hacer sus operaciones”, añadieron.
¿Qué pasó con el crédito en el último año?
Tras la crisis económica que generó la pandemia y un proceso de recuperación en el país durante 2021, la Encuesta de Demanda de Inclusión financiera, que se realizó entre abril y mayo de 2022, con una población de 5.513 personas en todas las regiones del país, demostró que el crédito no fue una herramienta buscada con frecuencia por los consumidores colombianos.
“El 68,3% de los consultados que dijo no tener un crédito formal ni tampoco haber hecho una solicitud durante el último año, las principales razones fueron: no querer tener deudas (66,9%), creer que es una opción costosa (32,6%), tener ingresos bajos (26,8%) y no contar con garantías (13,2%)”, señaló la Superintendencia Financiera.
Incluso, solo el 34% de los consultados tenía un producto de crédito vigente en 2021, un 1,1% menos que en 2020. Los más usados fueron los de consumo (21,3%) y las tarjetas de crédito (18,6%).
La cultura del ahorro es fuerte
Poco más de la mitad de la población encuestada señaló que tiene el hábito de ahorrar y un 77,6% de estos señaló que lo hace para tener un respaldo económico en caso de emergencias o imprevistos, es decir, un mecanismo de aseguramiento.
Los medios más utilizados para ahorrar fueron: billeteras virtuales con el 10,4%; los bancos, cooperativas o fondos de empleados con el 11,4%; y la tradicional alcancía u otro medio dentro de la vivienda en un 22,4%.
“Los datos obtenidos nos permiten ver cómo se aceleraron los procesos de digitalización, así como los cambios en el modelo de relacionamiento del sistema financiero con sus usuarios. Un escenario en el que los productos financieros digitales han venido siendo apropiados de una manera importante entre los consumidores financieros”, precisó la jefe de Finanzas Sostenibles de la Superfinanciera, Mariana Escobar.