Bloomberg — Para Christian Sewing, el director general de Deutsche Bank, la economía de Alemania es extremadamente resistente y más que capaz de soportar el impacto de la interrupción del suministro de gas por parte de Rusia.
Según el directivo, en una entrevista con el periódico Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung publicada este sábado, mientras que una interrupción completa de los suministros de gas ruso desencadenaría una recesión, Alemania, la mayor economía de Europa puede hacer frente a las consecuencias “sin importar lo mal que se ponga”.
“La capacidad de resistencia económica de nuestro país es enorme, no debemos restarle importancia. Eso también se aplica a nuestra capacidad de resistencia en el sector financiero, del que los bancos somos corresponsables. Estoy convencido de que si trabajamos juntos, la economía alemana puede salir adelante”, dijo Sewing.
El jefe de Deutsche Bank alertó sobre las posibles consecuencias ante un aumento de los costos para los hogares, afirmando que “la mayor carga para muchas personas está aún por llegar”.
También advirtió que la tasa de inflación anual de Alemania podría superar el 10% si Rusia deja de suministrar el gas por completo, frente al 8,5% de julio.
“Si los gastos mensuales son mayores que los ingresos, la gente consumirá menos y el estado de ánimo del país también se deteriorará”, dijo Sewing.