Bloomberg — La inflación en Alemania, la mayor economía de Europa, retomó su alza en junio, aumentando la presión sobre el Banco Central Europeo (BCE) que apenas la semana pasada y luego de más de 10 años, subió las tasas de interés.
El mes pasado y gracias a las medidas temporales del gobierno alemán, los precios al consumidor bajaron a un 8,2%, sin embargo este mes aumentaron un 8,5% al ser comparados con julio de 2021. Se esperaba que bajaran a un 8,1%, de acuerdo con analistas encuestados por Bloomberg.
Los boletos de transporte público subvencionados y el reembolso transitorio del impuesto al combustible, no han sido suficientes para compensar el gran aumento en el precio de los alimentos y la energía.
El alza de la tasa de interés del Banco Central Europeo en 50 puntos básicos , el doble de lo esperado por los expertos, es la consecuencia de una inflación récord que sufre la eurozona. Algunos funcionarios han promovido movimientos más fuertes a futuro después que Chirstine Legarde, la presidenta del BCE, dijera que era importante hacerle frente a las señales de perspectivas de precios más elevados.
Además de Alemania, se prevé que Italia y España anuncien el viernes nuevos récords de inflación. Los economistas consideran que el crecimiento de los precios en el grupo de la eurozona se aceleró hasta el 8,7% en julio.
Estas cifras incrementan la presión sobre el gobierno alemán, ya que los hogares se ven aún más afectados. Aunque los consumidores se beneficiarán de un transporte público barato hasta agosto, un posible corte de flujo de gas ruso amenaza con más complicaciones.
Christian Lindner, ministro de Economía y Hacienda y miembro del partido FDP, afín a las empresas, se ha mostrado hasta el momento contrario a la adopción de medidas de apoyo adicionales, aunque sus socios de coalición se preguntan si la ayuda existente es suficiente.
Los números de la inflación mostraron una diferencia considerable entre el índice nacional y el homologado de la Unión Europea que, según ING, se debe probablemente al “diferente tratamiento de las correcciones estacionales y de los días festivos empaquetados en ambas medidas”.
El índice armonizado también da mayor peso a los precios de los alimentos.
Carsten Brzeski, jefe global de macroeconomía de ING (ING), afirmó en un informe enviado por correo electrónico a sus clientes que “la caída en la medida nacional no es el principio del fin, sino más bien un alivio temporal inducido por el gobierno”.