Panamá — La demanda de stablecoins cripto va en aumento en América Latina, como cobertura al efecto combinado de la inflación y la devaluación de las monedas en la región, coincidieron líderes de la industria.
Los monedas estables se están ubicando entre las preferidas de los latinoamericanos para operar, afirmó Maximiliano Hinz, director general de Binance en América Latina, en una entrevista con Bloomberg Línea.
“Gran parte del volumen de criptomonedas operadas en Latinoamérica se traduce a las stablecoins”, dijo Hinz a Bloomberg Línea.
¿A qué se debe esta predilección? El especialista analiza que les resultan más familiares a los latinoamericanos, pues las stablecoins cuentan con paridad 1 a 1 con monedas tradicionales (fiat), tales como el dólar estadounidense.
“A medida que los usuarios conocen más sobre la plataforma (Binance) y las diferentes alternativas, vemos cómo migran a utilizar criptomonedas cuyo valor es más volátil dentro de las que se destacan bitcoin (BTC), ethereum (ETH) y binance coin (BNB)”, relató Hinz.
Según datos de Coin Market Cap, USDT (Tether), Binance USD (BUSD) y USDC Coin (USDC) figuran entre las de mayor volumen en la casa de cambio.
Cobertura ante la devaluación
En línea con este comportamiento, Mastercard ha detectado que la demanda por las stablecoins sube en países de la región, en donde surte un efecto de dolarización.
“Los consumidores están tratando de ahorrar parte de sus salarios para protegerse por temas de inflación y devaluación también con este tipo de monedas estables. Cripto como tal en Latinoamérica viene agarrando bastante tracción por ese tipo de soluciones”, comentó Daniel Acosta, jefe de Cripto y Blockchain de Mastercard para América Latina y el Caribe.
Bitcoin y ethereum son los líderes en la preferencia de los latinoamericanos, “pero sí se empiezan a ver algunas monedas como USDC que empiezan a tomar un poco más de relevancia en algunos mercados”, sostuvo el alto ejecutivo de la empresa.
Venezuela, Argentina, Colombia, México y Centroamérica destacan como mercados con interés sobre las monedas estables, identificó Acosta.
Los latinoamericanos ven a las monedas estables como una manera de experimentar si pueden tomar coberturas de una mejor manera ante la inestabilidad cambiaria, observó por su lado Allen Cueli, jefe de Productos e Innovación de Visa para América Latina y el Caribe.
Los consumidores están viendo a cripto como una inversión, más que un medio de compra, aunque esa percepción puede cambiar con la llegada de tarjetas de débito ligadas a cuentas de criptomonedas.
En una participación en Blockchain Summit Latam, Cuelli planteó los hallazgos de Visa Global Crypto Survey 2021, en donde el 31% de los encuestados en América Latina ya poseían criptomonedas, a septiembre del año pasado.
El 70% de los participantes latinoamericanos en el ejercicio habían comprado su primer cripto hace menos de un año, con un monto aproximado de US$1.000.
La medición de VISA abarcó a 6.430 personas mayores de 18 años a escala global, líderes de las finanzas del hogar con un ingreso familiar de al menos US$35.000 anuales (US$2.916,60 al mes).
Los mercados emergentes son más propensos a aceptar criptoactivos, pues el 28% de los encuestados de estas regiones dijo ser escéptico o no interesado en el tema, en contraste con un 43% de los mercados desarrollados.
Cuelli no obvió el caso de UST, la moneda estable algorítmica de Terra/LUNA, la cual sufrió un colapso en mayo. “Hay otras como USDC que sí están respaldados 1 por 1 con depósitos en cuentas comerciales”, matizó.