Bloomberg — Elon Musk cree que el fabricante de autos eléctricos Tesla Inc. (TSLA) logrará dejar atrás en la segunda mitad del año el “infierno de la cadena de suministro” que ha experimentado resaltando lo difícil que ha sido para la compañía conseguir piezas y materiales.
No obstante, el CEO de Tesla moderó su optimismo al hablar de la empresa, cuyas ganancias divulgadas el miércoles resultaron mejores a las esperadas. Tesla vendió aproximadamente el 75% de su participación en bitcoin (XBT) debido a la preocupación por su liquidez el pasado trimestre, cuando su planta de Shanghái cerró durante semanas a causa de las restricciones por Covid-19 en China.
“Tenemos el potencial de romper récords para la segunda mitad del año”, dijo Musk en una llamada con analistas el miércoles. “En los últimos años ha habido bastantes causas de fuerza mayor, y ha sido una especie de infierno en la cadena de suministro durante varios años”.
La mañana del jueves en Nueva York, las acciones de Tesla subían un 4,6% a US$776,48. Los valores acumulan una caída del 27% este año.
El fabricante estadounidense dijo en el reporte de resultados del segundo trimestre que el aumento de la producción en sus dos plantas más nuevas, en Alemania y Texas, tomará tiempo y requerirá superar los problemas de suministro en curso. Musk, de 51 años, dijo que si bien las celdas de batería más grandes que Tesla ha estado tratando de fabricar no serán un factor importante este año, la compañía tiene suficientes celdas de generación anterior para satisfacer sus necesidades.
Tesla dejó sin cambios su plan de aumentar las entregas de vehículos en un 50% en promedio anual durante varios años. La compañía tendrá que acelerar el ritmo para alcanzar esa marca en el segundo semestre, ya que problemas que van desde la escasez de suministros y la mano de obra hasta los problemas logísticos impiden que sus fábricas funcionen a plena capacidad.
“Mantienen su tasa de crecimiento del 50%, lo que es un poco sorprendente. Pensaba que podrían retroceder”, dijo Gene Munster, de Loup Ventures. “Están haciendo un buen trabajo navegando en un entorno difícil”.
Tesla obtuvo un beneficio ajustado de US$2,27 por acción, superando los US$1,83 por acción estimados por analistas según Bloomberg. El resultado estuvo por debajo de los US$3,22 por acción que Tesla reportó para el primer trimestre, marcando la primera caída secuencial de ganancias desde finales de 2020.
Los analistas están prestando mucha atención a la rapidez con la que Tesla puede aumentar la producción de su SUV Modelo Y para el mercado masivo desde sus nuevas fábricas, e introducir su tan esperada camioneta Cybertruck. Musk dijo en la llamada que Tesla está camino a producirlo a mediados del próximo año y cree que podría ser el “mejor producto de la compañía”.
Tesla dijo previamente que entregó 254.695 vehículos en todo el mundo en el trimestre, un 27% más que hace un año, pero por debajo de su récord del primer trimestre de 310.048 unidades. Se trata de la primera vez en dos años que la compañía no logra aumentar las entregas de vehículos de un trimestre a otro.
En abril, Musk pronosticó que la empresa produciría más de 1,5 millones de vehículos este año. Tesla había fabricado unos 564.000 hasta el primer semestre.
Los ingresos totales de Tesla aumentaron un 42% respecto a los de hace un año, hasta los US$16.900 millones, cumpliendo la estimación media de los analistas. Las ventas por créditos regulatorios ascendieron a US$344 millones, por debajo de los US$679 millones del primer trimestre.
Musk calificó las operaciones de Tesla con monedas digitales como “un espectáculo secundario de un espectáculo secundario” y dijo que la empresa está abierta a aumentar sus participaciones en criptomonedas, incluso después de que informara de un deterioro de bitcoin que redujo las ganancias del segundo trimestre.
La venta de la mayoría de los activos digitales de Tesla “no debe ser vista como “un veredicto sobre bitcoin”, dijo.