CMI Capital busca madurar el camino sustentable luego de sus bonos verdes

Enrique Crespo, CEO de CMI Capital, conversó con Bloomberg Línea y afirmó que continuarán invirtiendo en la región, especialmente en la generación de energía renovable.

Por

Guatemala — CMI Capital tiene un plan a muy largo plazo, a 100, 200 años, una meta ambiciosa, pero alcanzable, para una de las organizaciones más importantes de Guatemala.

La agrupación de Corporación Multi Inversiones (CMI), obtuvo el año pasado US$1.000 millones con la colocación de bonos verdes y un crédito sindicado, recursos que servirán para impulsar proyectos de sostenibilidad, cubrir deudas y preparar el camino para planes de largo aliento, dijo a Bloomberg Línea Enrique Crespo, CEO de CMI Capital.

“Encontramos mucho apetito por nuestra propuesta”, dijo Crespo en cuanto a la colocación de US$700 millones de bonos verdes. “Queremos gestionar nuestros negocios de tal forma que le entreguemos a las futuras generaciones negocios para otros 100 años o 200 años; y a los países donde operamos para otros 200 años, lograr hacerlos sostenibles indefinidamente”.

CMI Capital, maneja el negocio de generación de energía renovable, y servicios inmobiliarios y financieros del corporativo. Desde Guatemala, el portafolio de la agrupación opera en El Salvador, Honduras, República Dominicana, Nicaragua y Costa Rica.

Actualmente, tienen aproximadamente 400MW (megavatios) en energía solar y 300MW (megavatios) eólicos en desarrollo.

La otra agrupación de la empresa es CMI Alimentos, donde además de productos de consumo animal e insumos para restaurantes, se incorpora la cadena de restaurantes Pollo Campero. En total, la multilatina ha operado por más de 100 años y con 40.000 mil colaboradores tiene presencia en 15 países de Latinoamérica y EE.UU.

A continuación, lo más relevante de la entrevista con Crespo (respuestas editadas para su mayor claridad:

BL: ¿Cuál es el siguiente paso luego del “boom” de los bonos verdes, lograron sentar un precedente, hacia dónde van?

Crespo: Fuimos la primera empresa privada de energía renovable en la región que hizo una emisión tan grande en mercados internacionales, y fuimos bien recibidos por la comunidad internacional de inversionistas.

Estamos convencidos de que no es posible tener negocios sostenibles y rentables en el largo plazo en comunidades o países fallidos, por lo tanto, estas inversiones tan grandes que hemos hecho en energía renovable, usualmente las hacemos porque ahí están los recursos renovables, pero se encuentran en lugares remotos, y muy rurales.

Tomando en cuenta lo anterior, no podemos tener negocios rentables a espaldas de comunidades en donde hace falta educación, salud, y empleo. Estamos muy conscientes de eso y hemos generado iniciativas de desarrollo para las comunidades en las que operamos en todos los países.

BL: ¿Cómo se recibió esa colocación, confió el mercado?

Crespo: Sin duda, nosotros ahora que ya estamos en mercados internacionales, con nuestros bonos verdes, con el crédito sindicado, hemos logrado la confianza de múltiples inversionistas a nivel mundial.

De la colocación de bonos verdes por US$700 millones, alrededor del 52% de la colocación son inversionistas de Norteamérica, otro 30% se colocó entre inversionistas de Europa, y el restante 20% se colocó entre inversionistas de Asia, Latinoamérica y Oceanía.

Creemos que va a haber oportunidad importante de nuevas sindicaciones de créditos, de nuevas emisiones de bonos en los mercados internacionales, porque de alguna manera, ya estando en los mercados internacionales, ya forma parte de nuestro ciclo financiero y de nuestras modalidades de financiamiento que este negocio intensivo en capital necesita.

BL: ¿Y con quién o quiénes se han desarrollado esas relaciones claves y lograr que confíen en la corporación?

Crespo: Nosotros lo vemos como una cadena de valor financiera y el primer eslabón usualmente es la estructura del financiamiento y del proyecto en sí mismos.

A partir de ahí nos han apoyado históricamente instituciones financieras multilaterales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Corporación Financiera Internacional (IFC), el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), como bancos de desarrollo como el francés, alemán y holandés, también el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Han sido nuestros socios financieros en proyectos en etapa temprana, digamos, conforme vamos desarrollando, salen de su ejecución y entran en operación comercial. Ahí es el momento de refinanciar la estructura de financiamiento del proyecto, ese es el segundo eslabón.

Cuando estemos en esa etapa, en los nuevos proyectos que desarrollemos, van a volver a escuchar de nosotros con nuevas emisiones de bonos en los mercados internacionales y con nuevas sindicaciones bancarias, con socios financieros, aún hay mucho por hacer.

Hay una transición importante en el mundo financiero internacional, y es que poco a poco los grandes inversionistas institucionales del mundo están orientando sus capitales, sus recursos hacia inversiones como la nuestra, inversiones que se denominan Enviromental, Social y Governance (GES), en la práctica, hacen referencia a los factores que convierten a una compañía en sostenible a través de su compromiso social, ambiental y de buen gobierno, sin descuidar nunca los aspectos financieros.

Los inversionistas, que incluyen desde instituciones globales hasta personas individuales, están adoptando un enfoque sostenible para alcanzar sus metas de inversión.

BL: ¿Guatemala podría convertirse en un hub de inversiones verdes?

Crespo: Considero que es una gran oportunidad para Guatemala, pero también, para la región centroamericana y El Caribe.

Nuestra experiencia con la emisión del bono verde y con la colocación del crédito sindicado nos hizo muy claro y muy tangible que hay muchísimo capital en el mundo, dispuesto a invertir en energía verde, dispuesto a invertir en empresas responsables como la nuestra, y sobre todo a largo plazo.

Entonces yo creo que sin duda Guatemala debe ser un juego de atracción e inversión para la energía verde, como lo ha sido en los últimos 20 o 25 años. Ha habido una gran inversión en el país en energía renovable y se ha ido diversificando en la dirección correcta.

Entre más energía renovable se genere en Centroamérica y el Caribe, menos vulnerables seremos, porque nuestras industrias van a poder tener contratos de largo plazo para el consumo de energía con precios competitivos y estables; y eso va a hacer muchísimo más competitiva a la región.

Entonces nosotros estamos convencidos que, a más energía renovable y a más inversión de largo plazo, más competitividad, mayor atracción de inversión extranjera a la región y mayores oportunidades de trabajo para evitar la inmigración ilegal.

BL: ¿Qué sigue luego de la reestructura financiera o de la refinanciación, digamos de la plataforma de energía?

Crespo: Veníamos con una estructura financiera que nos sirvió para desarrollar los proyectos, pero toda vez el proyecto está en operación comercial, ya como un activo, resulta que esas estructuras ya nos quedaban como una camisa de fuerza, porque teníamos atrapadas muchas cosas y no podíamos invertir en crecimiento, esto generaba muchas asimetrías y un costo financiero quizá bastante alto con un perfil de amortizaciones de capital que no permitía liberar caja para poder seguir creciendo.

Esta refinanciación que hicimos con el bono verde y el crédito sindicado nos permite liberar una cantidad muy relevante de caja que vamos a usar y que ya estamos usando en proyectos de crecimiento en la región.

Las 4 categorías elegibles, cubiertas en el marco de los bonos verdes, las cuales han alineado a ODS específicos, son:

  • Energía renovable: Energía renovable y acción climática.
  • Eficiencia energética: Energía renovable y acción climática.
  • Edificios verdes: Innovación e infraestructura y ciudades y comunidades sostenibles.
  • Transporte limpio: Ciudades y comunidades sostenibles.

Otros temas relevantes abordados en la entrevista:

  • Enrique Crespo es el CEO de CMI Capital desde el 2018, ha liderado proyectos de generación de energía renovable; desarrollo de proyectos inmobiliarios y negocios de servicios financieros. Su trayectoria arrancó en el sector financiero de Guatemala, luego, incursionó en el mercado de valores, en la banca y el sector financiero, en general, un camino de casi 12 años.
  • Recientemente, la empresa privada de generación de energía renovable CMI Energía recibió el premio Green Market Pioneer in 2021, en la séptima edición de los Climate Bonds Awards, por su compromiso e innovación en finanzas verdes y sostenibles.
  • Países en donde seguirá invirtiendo CMI Capital son: Guatemala, Panamá y República Dominicana, que son mercados relevantes e interesantes para la corporación.
  • Trabajarán en impulsar la tecnología solar en Guatemala para poder seguir diversificando la matriz energética a través de fuentes renovables.
  • La Unidad de Energía cuenta con operaciones de plantas de generación renovable en Guatemala, que ascienden a más de 800MW, en El Salvador, Honduras y República Dominicana, así como Nicaragua y Costa Rica, donde se ejecuta una robusta estrategia de inversión social basada en cuatro pilares: infraestructura, educación, salud y medio ambiente.
  • La organización promueve inversiones de impacto que son precisamente aquellas que mientras permiten tener una rentabilidad competitiva consiguen beneficios medibles en temas sociales y ambientales.
  • Rothschild & Co y Clifford Chance actuaron como asesores financiero y legal, respectivamente, para CMI, en la transacción. Los bonos verdes fueron calificados Ba3 por Moody’s, BB- por Fitch Ratings y BB- por Standard & Poor’s (S&P); lo cual representa una mejora en las calificaciones previas.