Bloomberg Línea — Siete países latinoamericanos han demostrado tener entornos propicios para la movilización de inversión privada a través de Asociaciones Público-Privadas (APP) y desarrollar infraestructuras eficientes y sostenibles, según la última publicación del Infrascopio, una herramienta del Banco Interamericano de Desarrollo y Economist Impact, unidad de análisis del grupo The Economist.
La medición abarcó a 26 países de la región y evaluó la capacidad de estos para poner en marcha proyectos de APP en sectores como el transporte, la energía, el agua y el saneamiento, la gestión de residuos sólidos y las infraestructuras sociales.
De acuerdo con el presidente del BID, Mauricio Calver-Carone, “la región ha generado importantes avances” en esta materia y a futuro se deben invertir “US$2 billones en saneamiento, transporte, infraestructura de telecomunicaciones” y otros sectores que vayan en línea de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Al tiempo, destacó que en América Latina y el Caribe, por cada dólar que se invierte en la gestión de infraestructura, se agregan dos dólares al Producto Interno Bruto (PIB) de los países.
Los países con mejores resultados
La herramienta estableció tres categorías macro para clasificar a los países (desarrollados, emergentes y nacientes) de acuerdo a una puntuación de cinco aspectos clave para las APP: Reglamentos e instituciones, Preparación y sostenibilidad de los proyectos, Financiación, Gestión de riesgos y supervisión de contratos, y Evaluación de resultados e impacto.
Para el caso de Brasil y Chile, que se enmarcan en la categoría de desarrollados y lideran el ranking de LatAm, el informe señaló que son países con instituciones muy sólidas y bastante experiencia en las APP.
Entre tanto, para Uruguay, Colombia, Perú, Panamá y Costa Rica, que son desarrollados y con alto desempeño, un poco más abajo que Brasil y Chile, el BID precisó que se trata de mercados con APP productivas, que se han fortalecido a nivel legislativo para desarrollarlas y han tenido la asistencia necesaria para ejecutar los proyectos.
Sin embargo, el organismo señaló que “hay margen para una mayor mejoría, preparación de proyectos, sostenibilidad y evaluación”.
Para algunos de los emergentes como El Salvador, Guatemala, República Dominicana, México y Paraguay, se precisó que las inconsistencias en el desarrollo de las APP han sido una “falta de una coherencia global”, pues hay puntajes interesantes en algunos ámbitos, pero en muchos de los casos de estos países hay muchas brechas en cuanto a la capacidad de las APP.
El estudio resaltó entre sus conclusiones que desarrollar APP de infraestructura de calidad financiera y fiscalmente viables requiere reducir la incertidumbre a través de una asignación de riesgos transparente, consistente y eficiente, así como aplicar las lecciones aprendidas a través del monitoreo continuo del desempeño de los proyectos.
Esta es la distribución en términos absolutos de los países de LatAm, la movilización de recursos y su buena adopción de a las APP:
- Desarrollados-Líderes: Brasil y Chile.
- Desarrollados-Altos resultados: Uruguay, Colombia, Perú, Panamá, Costa Rica.
- Mercados emergentes en crecimiento: El Salvador, Guatemala, República Dominicana, México, Jamaica, Honduras, Paraguay.
- Emergentes-medios: Ecuador, Argentina, Nicaragua, Guyana, Bahamas.
- Nacientes: Haití, Trinidad y Tobago, Bolivia, Belice, Barbados, Venezuela, Surinam.