Guatemala — La subdeclaración involuntaria, la elusión y la evasión, así como también la facturación a consumidor final, son algunos factores detectados por la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) que han derivado en el incumplimiento del pago del impuesto al valor agregado (IVA).
Según la entidad, medidas como la digitalización de servicios para el pago de tributos han permitido a la entidad combatir esta problemática.
Según el estudio elaborado por la SAT la recaudación del IVA fue de Q35.6 millardos, de un potencial de Q43.4 millardos.
El Estado de Guatemala ha dejado de percibir, casi los Q8 mil millones. Pese a la cifra, el monto del incumplimiento de este tributo muestra una disminución en comparación con los últimos nueve años, el pico más alto se alcanzó en el 2016, cuando se alcanzaron los Q9,910.4 millones, equivalentes al 29.7% del PIB. Durante el 2017 fueron 9.882,5 millones de quetzales (28.2%).
Durante el 2020 el porcentaje aún permanecía por arriba del 20%. En ese entonces el monto fue de Q9.168,1 millones (24.8%).
Detectan incumplimiento en tiempo real
Por otro lado, Fernando Suriano, intendente de Recaudación, comentó que los resultados positivos de la tributación implican más de 35 esfuerzos sistemáticos por parte de la SAT.
El funcionario enfatizó que ahora por medio de la facturación Facturas Electrónicas (FEL) se puede determinar en tiempo real el incumpliendo de los tributos.
Además, la venta bajo facturas de Consumidor Final que sobrepasan dicha cantidad también genera una pérdida de impuestos.
La SAT, informó en marzo pasado, que empezarían una serie de fiscalizaciones a los contribuyentes que presentan este comportamiento y preparando una modificación al reglamento del IVA (impuesto al valor agregado) para que sea obligatorio emitir facturas con NIT o CUI (código único de identificación).
Estas acciones buscan reducir el número de facturación a consumidor final (CF), que el año pasado superó el 70% de la factura electrónica.
En el 2021, del total de las facturas electrónicas emitidas, el 71% se registró a consumidor final, en vez de NIT asociado a una persona individual o jurídica, equivalente a 650 millones 738.957 facturas.
De este total, 209.331 fueron por montos superiores a Q25 mil, lo que equivale a más de Q15 mil millones que no tienen un registro específico. El resto de las facturas identificadas fueron emitidas por montos menores a Q25 mil.
La facturación a consumidor final es preocupante, ya que rompe la cadena del pago oportuno de los impuestos. También promueve la informalidad y principalmente incide en la recaudación por el IVA e ISR (impuesto sobre la renta) que se deja de percibir, explicó el superintendente.
Los sectores identificados con más facturas emitidas a consumidor final son: comercio al por mayor; actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler; agricultura; ganadería; caza y silvicultura; industria y suministro de electricidad; gas y agua.
Ponerse a la vanguardia
Marco Livio Díaz, superintendente de la SAT, comparó esta situación con el de economías más desarrolladas, que tienen mejores controles y cierto porcentaje de incumplimiento tributario.
El funcionario aseguró que Guatemala se está poniendo a la vanguardia con sus pares de países de Latinoamérica en torno al cumplimiento de los impuestos.
La institución ha mantenido constantes procesos de análisis de percepción de riesgo y fiscalización, con lo cual hay una mejora continua en los controles de recaudación y del comercio exterior.