Bloomberg — El corredor cripto Voyager Digital Ltd. solicitó la protección por bancarrota del Capítulo 11 apenas unas semanas después de obtener un salvavidas de Alameda Research, del multimillonario Sam Bankman-Fried, citando la volatilidad del mercado y el colapso de un fondo de cobertura (Three Arrows Capital) al que había prestado dinero.
La empresa y sus dos filiales, Voyager Digital LLC y Voyager Digital Holdings, dieron el paso en el Distrito Sur de Nueva York, según se desprende de un expediente presentado el miércoles.
Voyager, que obtuvo una línea de crédito por valor de unos US$485 millones de de Alameda a mediados de junio, es parte de la creciente lista de víctimas de un colapso del que ha visto cómo se eliminan unos US$2 billones de valor del mercado cripto. En su declaración, Alameda figura como el mayor acreedor, con un préstamo no garantizado de US$75 millones.
“Creemos firmemente en el futuro del sector, pero la prolongada volatilidad de los mercados de criptomonedas y el default de Three Arrows Capital nos obligan a tomar esta medida decisiva”, dijo en Twitter el CEO de la compañía, Stephen Ehrlich, refiriéndose al fondo de cobertura que incumplió un préstamo de US$675 millones de Voyager.
Voyager ha presentado una lista de activos y pasivos de entre US$1.000 y US$10.000 millones, respectivamente, en su declaración.
La compañía tiene alrededor de US$1.300 millones en criptoactivos en su plataforma y US$350 millones en una cuenta llamada For Benefit of Customers en el Metropolitan Commercial Bank, además de sus reclamos contra Three Arrows, según indica una declaración separada. También tiene más de US$110 millones en efectivo y “criptoactivos propios” a mano.
Los titulares de cuentas de Voyager Digital Ltd., ahora en quiebra, no deberían esperar recuperar todo su cripto mientras la empresa se reorganiza.
El plan de la compañía para salir de la bancarrota dice claramente que espera que los titulares de las cuentas se vean “perjudicados” por el proceso del Capítulo 11, lo que significa que no se les devolverá exactamente lo que se les debe. Voyager tiene la intención de pagar a los usuarios con una mezcla de las criptomonedas que depositaron, acciones de la empresa reestructurada, tokens Voyager y dinero recuperado de Three Arrows Capital, según muestran los documentos judiciales.
Los clientes con depósitos en dólares estadounidenses en sus cuentas podrán reclamar ese dinero “después de que se complete un proceso de conciliación y prevención del fraude” con el Metropolitan Commercial Bank, según un comunicado de Voyager.
El mes pasado, Voyager emitió una notificación de default a Three Arrows en relación al préstamo. Está persiguiendo “activamente” la recuperación de los fondos, incluso a través del proceso de liquidación ordenado por el tribunal en las Islas Vírgenes Británicas, tuiteó Ehrlich.
Además de las operaciones comerciales y los préstamos, Voyager también ofrece staking (una forma de ganar recompensas por mantener la posesión de ciertas criptodivisas) y productos de rendimiento. Otras empresas de este sector, como Celsius Network, Babel Finance y Vauld, han suspendido los retiros de fondos desde principios de junio al agotarse la liquidez. Vauld, con sede en Singapur, está en conversaciones para ser adquirida por su rival Nexo, dijeron ambas empresas el martes.
“La declaración de bancarrota de Voyager básicamente confirma que el prestamista cripto sí utilizó los fondos de sus clientes como fuente de liquidez en dólares y los prestó a entidades como 3AC como una especie de operación apalancada, mientras que la misma compañia pedía dinero prestado de manera constante para cumplir con las solicitudes de retiro actuales”, dijo Mikkel Morch, CEO del fondo de cobertura de criptomonedas ARK36, utilizando el acrónimo de Three Arrows Capital.
Implosión
La moneda de Voyager se ha desplomado un 98% desde su máximo, según CoinGecko.
Las acciones de Voyager se desplomaron un 42% el lunes, reduciendo su valor de mercado a 66 millones de dólares canadienses (US$51 millones). La empresa estaba valorada en 2.700 millones de dólares canadienses a principios de año.
Rápido retroceso
Una política monetaria más estricta de los bancos centrales, que buscan frenar un aumento global de la inflación, ha pesado mucho en los tokens digitales. La caída que comenzó a finales de 2021 se aceleró con el colapso de la stablecoin (moneda estable) terraUSD en mayo, y luego se agravó cuando el bitcoin sufrió la mayor caída mensual de su historia en junio.
Durante el colapso del ecosistema cripto, Bankman-Fried surgió como prestamista de último recurso, proporcionando crédito a Voyager y llegando a un acuerdo para inyectar capital en BlockFi Inc. Bankman-Fried, cofundador de la bolsa de criptomonedas FTX US, también está abierto a explorar adquisiciones de mineros de criptomonedas maltrechos, dijo en una entrevista la semana pasada.
“La gran pregunta es si FTX puede respaldar todo, se están convirtiendo en un prestamista de último recurso similar a un banco central”, dijo Simon Taylor, jefe de estrategia y contenido de la startup de prevención de fraude de criptomonedas Sardine.