Bogotá — El dólar sigue ganándole terreno al peso colombiano y muchas otras monedas del mundo, entre las cuales también hay divisas fuertes como el euro. Menor apetito por el riesgo, entre los principales factores que están fortaleciendo al billete verde en el mundo.
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Este martes el dólar en Colombia cerró a $4.280, su nivel más alto en la historia. Con esta cifra el dólar superó uno de los picos que habían estimado desde inicio de año los analistas. Después de ello, las estimaciones se han ajustado y para los próximos días hay algunos que creen que el billete verde podría cotizarse incluso a $4.400.
“Realmente la tasa de cambio va a seguir siendo muy impactada por el frente externo, qué suceda con el petróleo y dólar a nivel global que está registrando máximos en el indicador DXY, además de la consolidación de un escenario de recesión”, explicó David Cubides, director de investigaciones económicas de Alianza Valores.
De acuerdo con Diego Gómez, analista de contexto externo y mercado cambiario de Corficolombiana, el rango de la divisa para esta semana podría estar entre $4.200 y $4.400, depreciación de la cual no solo el peso colombiano es protagonista, sino también otras monedas de la región, e incluso “es un patrón que se repite en las monedas desarrolladas”. Hay que recordar que el euro registró mínimos no vistos en 20 años.
Gómez añadió que la depreciación de las monedas frente al dólar se ha dado “por esta época de incertidumbre y de aversión al riesgo producto de una inflación global que se ha mantenido persistentemente alta, lo cual ha añadido incertidumbre a los activos financieros puesto que el mercado comienza a ponderar con mayor fuerza la posibilidad de un aterrizaje forzoso de la economía y por ende que tengamos ciertas talanqueras en la actividad económica mundial en este segundo semestre del año y algunos meses del próximo año”.
Desde la visión de Natalia Granados, analista senior de finanzas, “se espera que durante la semana el dólar siga aumentando su cotización, es altamente probable que llegue a tocar el siguiente nivel de referencia sobre los $4.300 conforme se mantenga la incertidumbre en los mercados por una posible recesión global y el petróleo continúe a la baja. El dólar es visto como un activo refugio en momentos de incertidumbre”.
Para Cubides, de Alianza Valores, esta semana esperan que el dólar se cotice en niveles cercanos a $4.200, principalmente por factores externos, pues “a nivel local las cosas están un poco más calmadas en el frente político”. Sin embargo, dijo que el dato de inflación de junio será determinante a la hora de pensar en el siguiente movimiento de tasas en el banco central, lo cual atajaría el aumento de los precios, pero también las expectativas de crecimiento.
El dólar más caro ya alerta al Banrep
Luego de que el jueves pasado el Banco de la República hiciera su aumento de tasas más fuerte en la historia, dejándolas en 7,5%, el Emisor publicó recientemente las minutas de dicha reunión donde puso de manifiesto que la depreciación del peso colombiano frente al dólar estadounidense le puede pasar una factura importante a la inflación, que se mantiene en cifras históricas (9,67% anual en junio).
En dicho documento advirtieron sobre los efectos inflacionarios que se podrían derivar de la depreciación reciente del peso frente al dólar como consecuencia fundamentalmente del ajuste que se viene observando en la política monetaria de los Estados Unidos y que se anuncia en la Unión Europea, lo que ya se ha reflejado en aumentos importantes de las tasas de interés a plazo en los mercados financieros globales.
Para entender mejor lo anterior, según explicó Germán Machado, docente de economía de la Universidad de los Andes, cuando el peso colombiano se deprecia frente al dólar, los productos importados son más costosos, lo que significa que todos los productos que se compran del exterior llegan más caros.
“Como la mayor parte de las importaciones colombianas son para el sector industrial y son insumos productivos, tecnología o maquinaria, eso genera que los productos nacionales también se encarezcan. Al final, el alza del dólar termina impulsando al alza la inflación. Una parte de la depreciación se convierte en mayores precios, que es lo que se conoce técnicamente como pass-through”, añadió Machado.
