Bloomberg — Un estudio realizado por el Banco de la Reserva Federal de Nueva York señala que el dólar estadounidense se mantiene como la principal moneda internacional, a pesar de los desafíos que plantean la geopolítica y tecnologías como las monedas digitales.
Los autores Linda Goldberg, Robert Lerman, y Dan Reichgott dijeron en una entrada de blog publicada el martes que “el papel internacional del dólar, ya sea para el comercio, la inversión o el uso como moneda de reserva mundial, continúa siendo bastante fuerte, y no hay nada en el horizonte que pueda competir con él”.
No obstante, el estudio cita algunos factores que podrían perjudicar el uso internacional del dólar con el tiempo.
La imposición de sanciones financieras a Rusia tras su invasión de Ucrania podría fomentar la desdolarización por parte de otros países ansiosos por evitar medidas similares contra ellos. Y esto podría fragmentar el papel global de la moneda estadounidense, escribieron los autores.
Las criptomonedas y las monedas digitales de los bancos centrales (CBDC por sus siglas en inglés) podrían acabar suplantando el papel transfronterizo del dólar en los pagos y las inversiones, aunque los autores plantean varias razones por las que esto podría no ocurrir.
Los avances por vincular las stablecoins al dólar podrían reforzar su estatus internacional. Del mismo modo, las CBDC se han dirigido hasta ahora a los mercados minoristas nacionales, algo que no pone en tela de juicio el papel internacional del dólar. Tampoco son tan atractivas como el dólar como depósito de valor, ya que están respaldadas en su mayoría por monedas locales que carecen de la aceptación global generalizada del billete verde.
“Ninguna moneda reproduce las características del dólar estadounidense como depósito de valor, unidad de cuenta y medio de cambio”, escriben los autores. “Además, los activos estadounidenses se consideran seguros y líquidos y han resistido los efectos de las crisis mundiales”.