Bloomberg — Los productores de litio y baterías advirtieron a la Unión Europea (UE) que una propuesta para clasificar el metal como toxina reproductiva podría perjudicar gravemente a la creciente industria europea de los vehículos eléctricos (VE).
El material es una parte clave de las baterías de los vehículos eléctricos y se utiliza ampliamente en productos farmacéuticos, lubricantes industriales y vidrios especiales. Una propuesta que está estudiando la Comisión Europea (CE) este mes incluiría algunas sustancias químicas del litio en la categoría más alta de toxinas para la reproducción y el desarrollo, basándose en parte, en estudios realizados en humanos en las décadas de 1980 y 1990.
Esto podría estigmatizar el uso de los materiales y reducir la inversión en el sector de los VE, según afirman cabilderos como Eurobat, la Asociación Internacional del Litio y Eurometaux en una carta abierta a los políticos. Los vehículos eléctricos desempeñan un papel crucial en los esfuerzos ecológicos y los fabricantes de automóviles, como Tesla Inc. (TSLA) de Elon Musk, han advertido que el aumento de los precios de los materiales y los cuellos de botella en la cadena de suministro amenazan su despliegue.
En la carta, los cabilderos expresaron su preocupación por la justificación científica de la clasificación, que podría llevar a que los productos químicos se establecieran como una “sustancia altamente preocupante” junto con las toxinas gravemente cancerígenas y mutagénicas que la UE quiere eliminar gradualmente restringiendo su uso.
Esto podría perjudicar los esfuerzos realizados por separado para impulsar la producción nacional de litio, que la Comisión designó como materia prima crítica en 2020. Las propuestas se refieren al carbonato, hidróxido y cloruro de litio.
“Si las tres sales de litio siguen este camino, podría tener importantes consecuencias imprevistas en la UE, poniendo en duda la viabilidad a largo plazo de la producción, el refinado, el uso y el reciclaje del litio” en la UE, declaró por correo electrónico el secretario general de la International Lithium Association (Asociación Internacional del Litio), Roland Chavasse.
La clasificación de las sustancias químicas como toxinas para la reproducción y el desarrollo podría imponer costos más elevados a los compradores y reducir los márgenes de los productores, lo que dificultaría la realización de nuevas inversiones en el sector, según Francesco Gattiglio, director de asuntos exteriores para la UE de Albemarle Corp. (ALB) La empresa es la principal minera de litio del mundo y tiene una planta de productos químicos de litio en Langelsheim (Alemania).
“Aunque el impacto para nuestros clientes especializados no está claro en este momento, no prevemos el cierre de nuestra planta de Langelsheim”, dijo Gattiglio por correo electrónico. “Con seguridad, la clasificación tendría un impacto negativo en la posibilidad de establecer plantas de conversión de litio en Europa”.
Este artículo fue traducido por Andrea González