Los ejes de la reforma tributaria de Boric

El proyecto impulsado por el Gobierno de Chile será ingresado en el Congreso la próxima semana

Por

Santiago — El presidente Gabriel Boric impulsa una ambiciosa reforma tributaria, que pretende recaudar un 4,1% del PIB para el financiamiento de la mitad de su programa de gobierno. Según el Gobierno, el objetivo está en avanzar en la equidad y la justicia tributaria para todos los contribuyentes, y generar recursos para desarrollar otros cambios estructurales relacionados con los derechos sociales y el desarrollo productivo y de las regiones.

Más allá del programa de gobierno, esta es una reforma que acerca al país a la estructura tributaria de países más avanzados y también busca expresar la idea de un pacto fiscal, que significa darle más estabilidad al sistema tributario en el futuro”, dijo Mario Marcel, ministro de Hacienda, durante la presentación del proyecto que será entregado al Congreso.

Los ejes de la reforma tributaria son un royalty a la minería, impuesto a los altos patrimonios, impuestos correctivos para promover la preservación del medioambiente, y medidas para combatir la evasión y elusión.

A continuación, los detalles del proyecto de reforma impulsado por el Gobierno de Chile:

Impuestos a las riquezas

El impuesto a los altos patrimonios gravará a 6.300 personas con domicilio en Chile, respecto a su riqueza en el país y en el extranjero.

  • Para este impuesto se considerarán dos tramos tributarios. Se cobrará una tasa marginal del 1% a las riquezas superiores a los US$5 millones, pero inferiores a los US$15 millones. Un segundo tramo contempla una tasa del 1,8% para los patrimonios mayores a los US$15.000 millones. Se indica que, dentro del patrimonio a declarar, se consideran, entre otros, la participación en sociedades, los inmuebles, vehículos, portafolios de inversiones e instrumentos financieros.

Royalty a la minería

El Congreso de Chile ya discute un proyecto que establece una compensación en favor del Estado por la explotación de la minería y el cobre y del litio. Su trámite legislativo está actualmente en el Senado, motivo por el cual el Gobierno ingresará en esa instancia una indicación.

  • La propuesta gubernamental es un nuevo royalty, que espera aumentar la tributación de la gran minería del cobre, definida como aquellos explotadores del metal rojo con una producción mayor a las 50 mil toneladas métricas de cobre fino (TMCF) al año. Será de “carácter híbrido”, porque combinará un componente sobre las ventas que oscilará entre tasas efectivas de 1% a 2% para los productores entre 50.000 y 200.000 TMCF anualmente, y entre 1% 4% para aquellos con una producción de 200.000 TMCF en adelante; y un segundo componente sobre la renta minera, con tasas de entre 2% y 32% “sobre la rentabilidad operacional, para precios del cobre entre dos y cinco dólares la libra”. Estas tasas dependerán del precio del metal rojo en el mercado.

Impuestos a la renta

  • Se establece un aumento de los impuestos personales a los salarios mensuales superiores a los 4.030.000 de pesos (US$4.321). La tasa marginal máxima sube de 40% a 43%, lo que se ubicaría en el promedio de los países de la OCDE.
  • El Gobierno propone avanzar a un sistema dual, que separa las tributaciones de la empresa de las de sus socios. De acuerdo con un comunicado de Hacienda, esta modificación pretende simplificar el sistema tributario y la “reducción de las horas de cumplimiento tributario del contribuyente”, porque se limitarán los registros y los formularios que se presentan durante la declaración anual de impuestos.
  • El impuesto de primera categoría se reduce del 27% actual a 25%. En contraste, se crea el impuesto “tasa de desarrollo” de hasta el 2% de las utilidades. Así las empresas podrían descontar en caso de acreditar que han destinado parte de sus inversiones a financiar proyectos relacionados a innovación y desarrollo (I+D), la compra de “manufactura y servicios de alta tecnología a proveedores locales, adquisición de bienes y servicios desarrollados con apoyo público, entre otras que impliquen inversión en productividad”.
  • Se establece el impuesto a las rentas del capital, equivalente a un 22%, que se aplicará a los dividendos pagados por las corporaciones cuando distribuyan a personas naturales o no residentes. Para los residentes en Chile se podrá, opcionalmente, “reliquidar sus impuestos; incorporando el dividendo a su impuesto global complementario”.
  • Se mantiene la tributación para no residentes en países con convenios para evitar la doble tributación.
  • Se proponen dos casos en que las personas naturales podrán efectuar deducciones de su base imponible de impuesto personal. El primero, es el gasto por arriendo con un tope de 8 Unidad Tributaria Anual (450.000 pesos al mes). En tanto, el segundo se trata del gasto asociado al cuidado de menores de dos años de edad y personas con grados de dependencia severa, con un tope de 10 UTA (550.000 pesos al mes).
  • Las Pymes podrán acceder a un crédito especial IVA para nuevos emprendimientos con el fin de acompañar a los emprendedores en su primer año de operación y, además, estimular la formalización. “También se reduce la tasa de interés por impuestos adeudados y se generan incentivos al pronto pago”.

TE PUEDE INTERESAR: