Montevideo - Buenos Aires — ¿Cuánto cuesta organizar un Mundial de fútbol? La pregunta tiene respuestas variadas en función de los distintos países que lo llevaron adelante, pero de lo que no hay dudas es que se trata de una inversión millonaria. Y, justamente, este aspecto se posiciona desde el inicio como una de las claves de la carrera que Argentina, Uruguay, Chile y Paraguay buscan volver a correr para quedarse con la organización de la Copa del Mundo en 2030. El torneo marcaría el centenario del primer mundial de la historia, organizado en 1930 en Uruguay.
Los gobiernos y asociaciones de fútbol promotoras de la idea realizaron la semana pasada una conferencia para reactivar la propuesta y en público comenzaron a considerar el uso de estadios, pero aún no ofrecieron detalles de cómo pagarán la organización. En un contexto internacional volátil, a lo que se suma un déficit fiscal elevado en ambos países, tanto en Argentina como en Uruguay advierten que el financiamiento será un escollo.
Una fuente argentina al tanto de las conversaciones para la organización del Mundial 2030 señaló a Bloomberg Línea, en primer lugar, que el Mundial 2030 no está en agenda hoy en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), ya que todos los esfuerzos están concentrados en Catar 2022. Pero también advirtió que, aunque el presidente de la AFA, Claudio Tapia, buscará avanzar en el tema eventualmente, el horizonte hoy luce complejo por la delicada situación financiera que atraviesa Argentina.
Otra fuente consultada del lado uruguayo indicó que la candidatura inicial tuvo una pausa durante la pandemia, instancia en la que Argentina ya había señalado las dificultades para costear su parte del torneo, que sería la de mayor incidencia en el presupuesto total.
En Uruguay el déficit fiscal se ubicó en 3,6% del PIB en los 12 meses cerrados a abril. La meta del gobierno es ir reduciendo el gasto para terminar el año con un rojo de 3,1% del PIB, implicando un margen acotado en lo que respecta a desembolsos vinculados a la candidatura.
Retoman las reuniones
La reactivación de la candidatura para el 2030 comenzó a gestarse en noviembre del año pasado, en ocasión de la disputa de la final de Copa Libertadores en Montevideo, dijeron las fuentes. Los contactos continuaron desde entonces.
El tema también estuvo en la agenda en la visita a Montevideo del ministro de Turismo y Deportes de Argentina, Matías Lammens, que viajó en abril a la capital uruguaya. Fuentes del gobierno argentino dijeron que en esa ocasión, durante una reunión con el secretario nacional del Deporte de Uruguay, Sebastián Bauzá, conversaron sobre la necesidad de confirmar la candidatura en el correr de este año, aunque no ingresaron en los temas de financiamiento de la propuesta.
La iniciativa había empezado a tomar forma en 2016, luego sumó en la carrera a Paraguay en 2017 y a Chile en 2019, pero se estancó en medio de la crisis ocasionada por el covid-19. Ahora, los ministros de Deportes trabajan en reactivar el tema, aunque la parte económica todavía no tiene avances.
Consultado por Bloomberg Línea, el presidente de la AUF, Ignacio Alonso remarcó que, más allá de las aspiraciones de las asociaciones, los gobiernos son los que apalancan “el impulso y la coordinación”. “Se están retomando las reuniones que quedaron en el freezer durante la pandemia”, resumió.
Los estadios para el 2030
Alonso fue optimista sobre las posibilidades, bajo el entendido que la FIFA adoptará “criterios” que abaratarán los costos.
“Los mundiales ahora van a ir incorporando criterios de sustentabilidad económica y ambiental, por tanto esa era de los mundiales fastuosos o de las inversiones super millonarias creo que también encuentra algún parate”, dijo el presidente de la AUF. “Si esta mirada de la sustentabilidad queda confirmada, me parece que no hay ningún tipo de aventura (financiera) o riesgo”, agregó.
El dirigente señaló que a partir de una base de estadios y aeropuertos ya existentes no habría “elefantes blancos” ni se comprometería gasto social, aunque señaló que desconoce detalles sobre nuevas obras requeridas.
Desde la AFA declinaron hacer comentarios debido a que el tema aún es incipiente en la agenda.
Los países habían conversado hasta 2020 de una distribución inicial de sedes, que implicarían la mayoría de los estadios en Argentina, seguido de Chile, y en menor medida Uruguay y Paraguay. El cálculo era albergar el torneo con entre 16 y 18 estadios.
En ese esquema de varias sedes, Uruguay defenderá su posición de ser la sede de la final del torneo, informó este jueves El Observador. La próxima reunión entre autoridades tendrá lugar entre julio y agosto en Montevideo, donde se buscará oficializar la candidatura desde el mítico Estadio Centenario, la sede de la primera final de una Copa del Mundo.
Los costos de un Mundial
Según datos de la FIFA, la Copa del Mundo de Qatar 2022 requirió una inversión total de US$1.696 millones. En 2018 el gobierno de Rusia gastó unos US$11.000 millones, y el evento dejó US$14.468 millones en la economía rusa.
La Copa del Mundo de Brasil demandó una inversión estimada en unos US$15.000 millones, y de ese dinero unos US$ 3.600 millones para los estadios. El Mundial dejó en Brasil en el entorno de US$13.500 millones en el país.
El más austero de los últimos torneos fue el de Sudáfrica 2010. La inversión para su organización fue de US$3.900 millones, al tiempo que se estimaron retornos en 4.400 millones.
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