Bloomberg — Tailandia pondrá fin al registro obligatorio previo a los viajes para los extranjeros y ampliará el horario de servicio de los bares, en un momento en que la nación, que depende ampliamente del turismo, busca atraer a los visitantes de todo el mundo para impulsar su recuperación económica.
El principal grupo de trabajo relacionado al Covid-19 aprobó la propuesta de eliminar el requisito del Pase de Tailandia para los turistas extranjeros, dijo el viernes a periodistas el ministro de Turismo, Phiphat Ratchakitprakarn. También respaldó la flexibilización de la obligación de llevar mascarilla en exteriores a partir del mes que viene debido al descenso de los casos, dijo.
“Es un paso clave para una mayor restauración de nuestro turismo”, dijo Phiphat. El gobierno espera unos 1,5 millones de turistas internacionales al mes en lo que queda de año, frente al objetivo anterior de un millón, dijo.
En la actualidad, los extranjeros tienen que cargar los detalles de sus vacunas y la prueba de un seguro médico que cubra al menos US$10.000 antes viajar para obtener el pase, que deben presentar en el embarque de su vuelo y la entrada al país. Los agentes del sector tailandés de viajes y ocio han pedido que se cancele el programa de registro, alegando que disuade a posibles turistas.
“Es una buena noticia y muy necesaria para el turismo tailandés, que lleva mucho tiempo con respiración asistida”, dijo Wuthichai Luangamornlert, director general de Siam Park City Co., operador de un parque de atracciones en Bangkok. “Aun así, la recuperación del turismo puede tardar mucho más con la ausencia de visitantes de China y Rusia, dos de las principales fuentes turísticas del país”.
Antes de la pandemia, el sector general relacionado con el turismo representaba alrededor de una quinta parte de la economía y el empleo de Tailandia, con casi 40 millones de visitantes extranjeros en 2019, según el banco central.
El gobierno también permitirá a los bares, pubs y clubes de karaoke ampliar su horario de servicio más allá del actual mandato de cierre, que pone como límite la medianoche. El tiempo máximo de servicio dependerá de las normas de los distintos municipios, según Phiphat.
El gobierno clasificará las 77 provincias como de bajo riesgo de brotes de Covid-19, o las llamadas zonas verdes, lo que permitirá a las autoridades locales relajar algunas restricciones comerciales y de viaje. El Ministerio de Sanidad también ha rebajado el nivel de alerta de Covid-19 a 2 para reflejar el descenso de los brotes de infección, según un comunicado.
La relajación de las medidas se debe a que los casos locales de Covid-19 han descendido a unos 2.000 al día desde los casi 30.000 de principios de abril.
Aunque la obligación de llevar mascarilla en los espacios exteriores se suprimirá a partir de julio, “se sigue recomendando su uso cuando haya otras personas alrededor o en lugares concurridos, como mercados, estadios deportivos y conciertos”, dijo Phipat.
Este artículo fue traducido por Estefanía Salinas Concha.