Gustavo Petro es el nuevo presidente de Colombia

Por primera vez en la historia de Colombia llega a la Casa de Nariño un mandatario de izquierda

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Bogotá — Colombia gira a la izquierda. Gustavo Petro Urrego, exalcalde de Bogotá y exguerrillero del M-19, es elegido como el próximo presidente de Colombia para el periodo 2022-2026. Petro, líder de izquierda por varias décadas, firmó la paz como miembro de la guerrilla del M-19 en los años 80. Desde entonces ha sido senador, alcalde de Bogotá y ahora, presidente. También será vicepresidenta Francia Márquez Mina, líder social, y la primera mujer afro en ocupar ese cargo.

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Con el 98,86% de las mesas informadas, Gustavo Petro obtiene 11.185.671 votos (la mayor votación en la historia del país), el 50,49% de la votación. Por su parte, el ingeniero Rodolfo Hernández tiene 10.468.781 votos, el 47.25% de la votación, quien aceptó la derrota.

Desde crear un frente antipetróleo, hasta reformar el Banco de la República para dar voz a las “organizaciones productivas” y elevar los impuestos a los latifundios de tierras fértiles que no produzcan, las propuestas del político y exguerrillero han generado eco en Colombia previo a las elecciones, bien sea en aquellos que respaldan su proyecto o quienes las ven como una amenaza e incluso se han referido a la llamada ‘Cláusula Petro’.

Para tener como contexto

La economía colombiana se anotó una caída del 6,8% en el 2020, un año marcado por los cierres de los comercios y el confinamiento de la ciudadanía por cuenta de la pandemia, que también se ensañó contra el empleo. La crisis económica, y el anuncio de una polémica reforma tributaria en Colombia, llevó al país a un paro nacional que se inició en abril de 2021 y se extendió por varios meses con manifestaciones esporádicas en contra del Gobierno colombiano.

Diferentes ONG han denunciado que en el marco de las protestas en ese país suramericano se registraron 84 fallecidos, de los que 28 son atribuibles a la fuerza pública. En medio de la tensión social Gustavo Petro capturó buena parte del inconformismo de ese segmento de la población colombiana y ha optado por las plazas públicas para difundir su proyecto político que dice ser enraizado al progresismo.

Petro es economista de la Universidad Externado de Colombia, tiene estudios en Administración Pública, así como en Medioambiente y Desarrollo Poblacional.El exalcalde de Bogotá entre 2012 y 2014 también tiene estudios de doctorado en Nuevas Tendencias en Administración de Empresas en la Universidad de Salamanca.

En su juventud, Petro militó en la guerrilla colombiana del M-19, activa entre 1974 y 1990 tras un acuerdo de paz con el Gobierno colombiano que derivó en la Alianza Democrática M-19, que participó en la redacción de la Constitución de 1991.

El 6 de noviembre de 1985, el día de la toma del Palacio de Justicia en Bogotá por parte del M-19, considerado uno de los episodios más sangrientos en la historia colombiana, Petro fue encarcelado en Zipaquirá por porte ilegal de armas.Tras la conformación de la Alianza Democrática M-19, Petro dio el salto a la Cámara de Representantes en 1991 por el departamento de Cundinamarca y en 1994 fue nombrado en la Embajada de Colombia en Bélgica como agregado diplomático para los Derechos Humanos.

Luego regresó a Colombia y asumió como miembro de la Cámara de Representantes de Colombia entre 1998 y 2006, convirtiéndose en una de las voces que denunció el fenómeno del paramilitarismo en Colombia.

Del Senado a la Alcaldía

Gustavo Petro ejerció como senador del 2006 al 2010, consolidándose como una de las voces más críticas al Gobierno de Álvaro Uribe, quien es el líder del actual partido de Gobierno, el Centro Democrático.

En 2012 asumió como alcalde de Bogotá, pero pronto su iniciativa de desprivatizar el modelo de recolección de basuras de la capital le generó problemas, al punto de que fue señalado como responsable por parte de la Procuraduría General de los fallos en la implementación del esquema.

En diciembre del 2013, ese Ministerio Público ordenó la destitución de Petro y su inhabilitación por 15 años, pero fue restituido en 2014 luego de que el Consejo de Estado anulara esa medida y en agosto de 2020 la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) consideró que sus derechos políticos se vieron afectados en el proceso.

Petro, que defendió que su destitución fue una persecución política, volvió a medirse en las urnas para las elecciones presidenciales del 2018 y tras su derrota asumió como senador. En la actualidad concurre por la Presidencia con el Pacto Histórico, que es una colación política de la que hacen parte varios movimientos que se denominan progresistas y socialdemócratas.