Tegucigalpa — La relación comercial y de inversiones entre Honduras y Sri Lanka es muy poca, pero existe el interés de ambas partes por fortalecer las cooperaciones bilaterales y explorar nuevas posibilidades de negocios.
Hasta ahora, el intercambio entre los dos países se da, principalmente, de turistas hondureños de alto poder adquisitivo que viajan a ese destino para celebrar su luna de miel.
Sin embargo, la nación insular de Asia Meridional se encuentra inmersa en la peor crisis política, social y, sobre todo, económica desde su independencia de la India en 1948. La creciente crisis económica comenzó a sentirse tras la pandemia del covid-19 que causó la falta del ingreso de divisas provenientes del turismo y las remesas familiares.
La escasa entrada de divisas extranjeras y las decisiones de la Administración que analistas consideran desacertadas, también se suman al endeudamiento acumulado y los recortes fiscales, que han llevado al país al colapso económico.
La relación con Honduras
Sri Lanka mantiene relaciones diplomáticas con Honduras a través de su embajada en La Habana, Cuba, establecida en la isla desde 1987 y que también cubre Dominica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Haití, Jamaica, Panamá y Venezuela.
La embajada de Sri Lanka en La Habana es una de las dos representaciones de Sri Lanka en toda la región de América Latina y el Caribe. La otra representación está en Brasilia, Brasil.
Días atrás, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, recibió las cartas credenciales de Lakshitha Ratnayake, embajador de la República Democrática de Sri Lanka. En ese breve encuentro, ambas partes dijeron que continuarán fortaleciendo las cooperaciones bilaterales.
Ese mimo día, el 16 de junio, el diplomático hizo una visita de cortesía a la Cámara de Comercio e Industria de Tegucigalpa (CCIT), organización sin fines de lucro fundada en 1890, que asocia en forma voluntaria a empresas comerciales, industriales y de servicios, para apoyar, defender y promover el desarrollo empresarial de Honduras.
“El embajador de Sri Lanka anda buscando establecer oportunidades de negocio, tanto para exportación de Sri Lanka a Honduras, como exportaciones nuestras hacia ese país”, dijo Rafael Medina, director ejecutivo de la CCIT, quien participó en esa reunión.
En el diálogo, los empresarios capitalinos y el diplomático coincidieron en que el valor de los fletes marítimos resulta un desafío para el desarrollo de las relaciones comerciales entre ambas naciones.
En tanto, según Medina, las misiones exploratorias pueden resultar un buen ejercicio entre Sri Lanka y Honduras para identificar oportunidades negocio y saber qué productos o sectores tienen potencial en cada mercado.
“Sri Lanka tiene muy fuerte el cultivo de arroz y de mariscos, y la maquila es importante, pero recordemos que Honduras más bien está tratando de atraer el establecimiento de más maquilas en el país, aprovechando la cercanía que tenemos con Estados Unidos”, agregó el director ejecutivo de la CCIT.
A propósito del nearshoring, Medina refirió que es una oportunidad de negocio “muy importante que tenemos que aprovecharla. El hecho del encarecimiento de los fletes marítimos y las distorsiones que hay en las cadenas de suministro, es importante que debamos aprovecharlo, ofreciendo un clima de negocio adecuado para atraer las inversiones”.