En las últimas horas se llevó a cabo un nuevo cambio en la junta del Grupo Sura. La organización informó que los miembros patrimoniales Jorge Mario Velásquez Jaramillo, presidente del Grupo Argos, y Alejandro Piedrahita Borrero, y los miembros independientes, María Carolina Uribe Arango y Jaime Bermúdez Merizalde, todos postulados por Argos, renunciaron a sus cargos.
Con esta decisión, el Grupo Sura se queda, por primera vez, sin los administradores de las otras empresas del Grupo Empresarial Antioqueño (GEA) en la junta. El último en salir de ese órgano fue hace cinco días, cuando entró Ángela María Tafur, postulada por los Gilinski, por Carlos Ignacio Gallego, presidente de Nutresa.
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La salida de estos miembros de junta se da días después de que el revisor fiscal de Sura anunciara que, tras pedido de Jaime Gilinski, se citaba una asamblea extraordinaria el próximo 23 de junio para definir la votación para vender o no en la OPA que los mismos banqueros hicieron por acciones del Grupo Argos. Un día antes, el 22 de junio, se decidirán los reemplazos de Velásquez y los otros miembros de Argos en Sura.
En el mercado, este último movimiento se ha interpretado como una estrategia del GEA para evitar más conflictos de intereses y aligerar las tomas de decisiones ante la arremetida de los Gilinski, quienes ya tienen el 38% del Grupo Sura, y han puesto sobre la mesa la oferta de Argos por hasta el 32,5% de sus acciones, que, de llegar al objetivo, pondría aún más en a prietos a los empresarios paisas.
Hay que tener presente que la Junta de Grupo Sura ha tenido varios conflictos de interés entre sus integrantes por lo cual las decisiones sobre la Asamblea han recaído, hasta ahora, en los integrantes independientes del órgano asesor.
Esta semana poselecciones se vivirá un nuevo pulso en Medellín con estas asambleas, que es un hecho inédito en la historia de esos conglomerados: dos asambleas en la misma semana. En la de Sura, se escogerán los reemplazos de los postulados del Grupo Argos a partir de nombres de directivos paisas de una siguiente generación, que incluso tienen vínculos familiares con los llamados ‘cacaos‘ del GEA. Y en la del jueves se conocerá el alcance del plan de los Gilinski.
Previo a las renuncias de las últimas horas, el interés de los banqueros de pedirle al revisor fiscal que cite a una nueva asamblea extraordinaria era de bloquear al representante de Grupo Argos en la Asamblea de Sura al aducir que estaría impedido para votar, lo que reduciría los votos del GEA y por lo cual Gilinski tendría el camino despejado para lograr el control de Grupo Argos y, tras este, tomarse las demás empresas del GEA. Ahora, con estas renuncias, ese camino no está tan claro.
