Bloomberg — Las acciones estadounidenses subían el viernes después de horas de volatilidad, a medida los operadores analizan los comentarios de los funcionarios de la Fed, quienes reiteraron que el banco central necesita hacer más para frenar la inflación más alta en 40 años.
El S&P 500 y el Nasdaq 100, donde las tecnológicas tienen un gran peso, subieron después de que la caída del jueves llevara a las acciones estadounidenses a su nivel más bajo desde finales de 2020. Los rendimientos del Tesoro a 10 años rondaban el 3,1%. El dólar terminó con dos días de pérdidas.
Los mercados están cerrando una semana marcada por las subidas de tasas, incluida la de mayor envergadura por parte de la Fed desde 1994, la sorprendente subida del Banco Nacional Suizo y el último aumento de los costes de endeudamiento en el Reino Unido. Las subidas están drenando liquidez de los mercados, provocando la caída de distintos activos.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo el viernes que el banco central está “muy centrado” en devolver la inflación al 2% y que era probable otra subida de tasas de tres cuartos de punto porcentual o una de medio en la reunión de julio. La presidenta del Banco de la Reserva Federal de Kansas City, Esther George, dijo que se oponía a la decisión de la Fed del miércoles porque la medida, combinada con la reducción del balance del banco central, crea incertidumbre sobre las perspectivas.
“Creo que tenemos que trabajar sobre la base de que el entorno macroeconómico y de inversión seguirá siendo potencialmente muy frágil”, dijo Christian Nolting, director de inversiones globales de banca privada de Deutsche Bank. “La recuperación no será sencilla e, incluso en las hipótesis más optimistas (por ejemplo, sobre la reapertura económica de China), cuestiones como la interrupción de la cadena de suministro tardarán en solucionarse”.
Los datos de producción de las fábricas estadounidenses de mayo apuntan a un enfriamiento de la demanda, ya que la producción disminuyó inesperadamente. En tanto, la producción industrial de mayo aumentó, pero por debajo de las estimaciones.
Las acciones mundiales se enfrentan a una de sus peores semanas desde la agitación inducida por la pandemia de 2020 y algunos inversores no están seguros de que los activos se hayan hundido lo suficiente como para incorporar el ciclo de endurecimiento a los precios.
“La recesión a corto plazo se ha convertido en una conclusión inevitable para muchos inversores; las únicas preguntas ahora son su duración y la gravedad de su impacto en las ganancias”, escribió Chris Harvey de Wells Fargo en una nota.
En comparación con los dos últimos mercados bajistas, que también se asociaron a una inflación galopante, el actual, de seis meses, tiene un largo recorrido por delante, dijo Harvey. La caída de 1980-1982 duró poco más de 20 meses, al igual que la de 1973 y 1974.
El bitcoin volvió a caer por debajo de los US$21.000, después de romper su racha más larga de pérdidas según los datos de Bloomberg que se remontan a 2010 a primera hora del viernes.
En una señal de la creciente agitación en la comunidad de criptomonedas, Babel Finance se convirtió en el segundo gran prestamista de activos digitales esta semana en congelar los retiros, diciendo a los clientes que se enfrenta a “presiones de liquidez inusuales”, ya que se enfrenta a las recientes caídas del mercado. El petróleo cayó porque los operadores sopesaron la perspectiva de un crecimiento económico más lento y la escasez de suministros.
