Conflicto en Citi de Uruguay: AEBU pide apoyo a sindicato argentino para que interceda

Montevideo — La Asociación de Empleados Bancarios del Uruguay (AEBU) pidió esta semana apoyo al sindicato argentino Asociación Bancaria en medio del conflicto que llevan adelante los trabajadores de la banca privada en Uruguay por el anuncio de despidos en Citi tras vender el negocio de banca offshore a Insigneo, un broker norteamericano. El representante de los trabajadores del sector financiero privado, Juan Fernández, dijo a Bloomberg Línea que entre los planes de profundización de los reclamos “no se descarta” una “huelga” de funcionarios.

Una delegación de seis integrantes de AEBU viajó el miércoles 15 a Buenos Aires para reunirse con dirigentes de La Bancaria, el nombre con que se conoce al sindicato argentino. Fernández, que lideró la comitiva, dijo que acompañaron una marcha que terminó en la sucursal de Citi sobre la calle Bartolomé Mitre en la capital argentina, en medio de un reclamo de los trabajadores argentinos por un conflicto con trabajadores de la ciudad de Bahía Blanca.

AEBU pidió al sindicato argentino que interceda para que los trabajadores uruguayos sean recibidos en Argentina por el CEO regional de la empresa, Julio Figueroa. “Sabedores de la fuerza que tienen nuestros hermanos de La Bancaria, cruzamos el charco para obtener la entrevista”, dijo Fernández. “Queremos pedirle la posibilidad de no despedir a los trabajadores que manifiesten su decisión de seguir trabajando”, añadió.

Durante el viaje a Buenos Aires, los sindicalistas uruguayos estuvieron reunidos con el diputado del Frente de Todos, Sergio Palazzo, secretario general de la Asociación Bancaria.

Ante la consulta de Bloomberg Línea, desde Citi dijeron que la empresa no tenía nuevos comentarios para hacer sobre el tema.

Citigroup junto a Insigneo emitieron el 16 de diciembre de 2021 un comunicado para informar de la venta del área de banca de inversión. Scott Schroeder, director de U.S. International Personal Bank en Citi, dijo en ese momento que la venta “permite simplificar” el negocio de gestión patrimonial. “Vimos la oportunidad de seguir brindando a nuestros clientes servicios de banca retail de primer nivel mientras continúan trabajando localmente sin disrupciones con sus profesionales de inversión, quienes al cierre de la transacción pasarán a Insigneo, el cual ofrece un amplio espectro de productos de inversión y capacidades de gestión patrimonial”, afirmó el ejecutivo en el comunicado.

Además el banco realizó una declaración adicional a los medios donde afirmó que, al momento de operativizar la venta, la relación laboral con los empleados llegaría a su fin “en pleno cumplimiento de las leyes de Uruguay y las políticas de Citibank Uruguay”. En esa declaración la empresa aseguró que Insigneo se ofrecería a entrevistar a los empleados de Banca Personal Internacional y aseguró que “la mayoría” de ellos permanecerían empleados.

El conflicto

Los trabajadores sindicalizados de la banca privada reclaman por los anuncios de despido tras el acuerdo de Citi con Insigneo para absorber la gestión de patrimonio offshore. El conflicto empezó solo con los empleados de Citi y en las últimas semanas se extendió a todo el sector privado.

Mientras el conflicto continúa en Uruguay y los funcionarios del sector financiero privado aseguran estar prontos para activar medidas sorpresivas, Fernández dijo que también está sobre la mesa profundizar las distorsiones.

“La potencialidad de la acción y de la resistencia que se vaya a ejercer en el sistema financiero uruguayo no se conoce. No se descarta una huelga, no descartamos unificar el conflicto del sector privado con el de banca oficial. Entonces ahí habrá que resolver las vacantes de los bancos oficiales, la pérdida de salario que afecta a nuestros compañeros de los bancos públicos”, dijo el dirigente de AEBU.

La unidad vendida a Insigneo tenía 29 empleados, 16 de ellos afiliados al sindicato y 13 que no integraban AEBU, afirmó Fernández. Según sostuvo, entre los sindicalizados, hay cinco que pasarán a Insigneo, por ser gestores de cuentas, mientras tienen incertidumbre por otros 11 asistentes y funcionarios operativos. Al ser consultado días atrás para una nota anterior, el sindicalista consideró probable que al menos cinco de esos 11 realicen acuerdos económicos para retirarse de la empresa de forma voluntaria.

Las medidas implementadas hasta ahora en la banca privada fueron el cese de las horas extra y la imposibilidad de cambiar de lugares de trabajo. Además el 8 de junio y el 31 de mayo fue realizado un paro sorpresa en algunas sucursales de la ciudad de Montevideo.

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