Montevideo — El gobierno uruguayo anunció que la regulación del mercado del supergás y de combustibles líquidos dejará de estar a cargo de la petrolera estatal, Ancap, y pasará a ser coordinada por la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea).
Así lo confirmó el ministro de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini en una rueda de prensa, según publicó este martes el matutino montevideano El País.
El funcionario sostuvo que la medida responde al objetivo de hacer “más eficiente” la cadena de la producción de supergás, y agregó que la intención es que Ancap se convierta solamente en un suministrador del combustible.
“Ancap es un proveedor, desde el punto de vista de Ducsa tiene una distribución pero hoy no tiene envasado y no lo va a tener probablemente. Vamos a intentar generar reglas de juego que permitan que el supergás siga llegando a toda la ciudadanía, en todo el país, de la manera más económica posible”, afirmó Paganini.
En ese sentido, el ministro consideró que Uruguay enfrenta un “problema” con el subsidio generalizado del supergás.
“Si uno puede ir separando los sectores que quiere subsidiar más, de los que no subsidiaría tanto, es un avance”, sostuvo, aunque advirtió que aún se deberá “ver cómo funciona el proceso para cambiar la forma de relación de las distribuidoras de supergás con Ancap”.
Paganini también se refirió a avances por parte del Gobierno en la modificación de la relación entre Ancap y las distribuidoras de combustibles líquidos, en un proceso que definió como “transitorio”.
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