Bloomberg Línea - El invierno tecnológico se habría acelerado para Kavak, el unicornio mexicano valuado en más de US$8,7 mil millones de dólares, del que se han reportado despidos en su subsidiaria de Brasil. De acuerdo con diversos testimonios que Bloomberg Línea recopiló, se habla de por lo menos 50 personas que han salido de la empresa en un proceso que lleva varios días.
Los despidos, tanto en las oficinas de Sao Paulo como en la llamada ‘Kavak City’ en Río de Janeiro, se dan luego de que apenas este año la firma de compraventa en línea de autos usados reafirmó un compromiso de inversión de US$500 millones en el mayor mercado latinoamericano.
Bloomberg Línea ha tratado de obtener una postura oficial de los ejecutivos de Kavak, tanto en México como en Brasil, pero declinaron hacer comentarios.
En LinkedIn diversos usuarios identificados con Kavak publicaron testimonios en cuanto a la manera en que fueron despedidos de la empresa. Algunos ahora exempleados contaron a Boomberg Línea que las maneras en que se les desvinculó de la empresa no fueron las mejores.
”Fue de una manera fría y sin justificación real”, dijo una persona que pidió no ser nombrada ya que estaría considerando sumarse a una demanda laboral en contra de la startup mexicana. Otra persona refirió a Bloomberg Línea que la empresa le dijo que “no encajas en la cultura laboral” de Kavak.
Algunos testimonios indican que los despidos en Brasil se vienen dando desde marzo de este año.
Entrevistado hace unas semanas Federico Ranero, COO de Kavak, dijo que el equipo es importante para la operación, pero recalcó que “Kavak no es para todos. Este es un lugar de alta exigencia donde no podemos comprometer un desempeño promedio o relativo a lo que hace el mercado porque tenemos que hacer algo absolutamente distinto y eso habla de innovación continua. Eso habla de exigir muchísimo al equipo y llegar a metas cada vez más altas”.
Un exempleado de Kavak en Querétaro dijo a Bloomberg Línea que los procesos de contratación no tenían el suficiente rigor, que se contrataba personal con perfiles que no respondían a las exigencias, lo que derivaba en constante rotación de personal y burnout de sus empleados.